sábado, 13 de mayo de 2017

Aceptando la realidad

Escribir siempre me ha ayudado a pasar los malos ratos, o por lo menos a descargar emociones para superar etapas difíciles. Ya que llevo llorando desde el miércoles (algunos días más que otros), y he pasado de la profunda tristeza a la ira a fuego lento, creo que es un buen momento para poner esto por escrito.
Resultó que sí me hice más ilusiones de las que yo misma pensé que me hacía. Resultó que quería eso más de lo que yo misma suponía. Resultó que me sacaron de la lista y no iré a China con una beca de deportes por cinco meses. ¿Por qué alguien que, como yo, iba recomendada por el Entrenador chino que vino a evaluar a los bolivianos, y que además iba recomendada por otras personas, eso sin contar con mi recorrido en el deporte no irá a China becada? La respuesta eso, jóvenes saltamontes, es tan obvia como molesta y casi insultante: por mi edad. Mandarán a un niño de 14 años, que es buen arquero, no lo negaré, pero que no dispara a la distancia de competición porque es más joven que yo.
Si van a opinar que los jóvenes son el futuro de cualquier deporte, que es mejor que los jóvenes vayan y aprovechen estas oportunidades, ahórrense el aire y permítanme iluminarlos con un detalle: en el tiro con arco, a diferencia de otros deportes, no es indispensable que uno sea "joven" para ser buen arquero. La edad no es precisamente relevante en esto.
Pero al parecer los encargados del Ministerio no saben eso, y les valió madres...
¿Tengo o no derecho a sentirme molesta? 
A eso súmenle un alboroto de lo más desagradable que hubo después, del que nos llegaron rumores...pero estos días hay tantos rumores, verdades a medias o tergiversadas, historias que no coinciden unas con otras... No sé qué creer, ni a quién creer. Todo es molesto y confuso, y no es la adolescencia!! Siento ganas de golpear algo o alguien (de preferencia en la cara y con un martillo), pero no puedo hacerlo.
La peor parte es que trato de alegrarme por dos amigos que sí van. Se lo merecen y se lo ganaron en justa ley, pero al parecer no soy tan buena persona como me gusta creer y la envidia y la autocompasión andan haciendo de las suyas. Ninguno se merece que me desquite con ellos por algo que es suyo en justicia, en especial porque son mis amigos y sé que querían que fuera. Incluso creo que tenían más fe que yo misma en mi plaza... en fin, todo acabó en nada.
Escribo esto porque así me hago a la idea. Si escribo algo es porque ya es definitivo y no cambiará. Ellos irán a China y yo no. Debo aceptarlo de una vez y seguir adelante.

domingo, 7 de mayo de 2017

Mientras esperamos la respuesta...

La incertidumbre mata, y la espera puede llegar a ser muy desesperante. Esta última semana he estado oscilando entre la seguridad y la más completa duda. Dudo de mí misma, de mi capacidad para hacer un buen papel, dudo que toda la fe que muchas personas ponen en mí sea realmente justificable por mi desempeño... Son muchas dudas y muchos sentimientos encontrados. 
Quisiera encontrar una mejor forma de expresar mis ideas, o al menos poder decir de qué va todo este jaleo, pero al menos esto último es parte de mi "estudiado" plan para no caer en el excesivo entusiasmo que pueda acabar en una dolorosa decepción. Siendo así la cosa, ¿qué mejor que recurrir a los métodos comprobados de "equilibrar" mi mundo y regresar a un estado de ánimo apacible?
Como muchas veces he mencionado en este blog, tengo muchos vicios literarios, uno de los cuáles es Jane Austen y sus excelentes novelas, muy especialmente "Orgullo y Prejucio". Cada vez que lo leo (porque lo he leído infinidad de veces), o encuentro alguna nueva adaptación, me sorprende cómo una historia que ya tiene 200 años puede ser contada una y otra vez y seguir siendo actual. Incluso cuando la situación de la mujer ha mejorado mucho con el paso de los años, es fácil seguir pensando en Elizabeth Bennet como una amiga cercana, o como una chica con la que una se podría identificar.
El último ataque "austeniano" comenzó en el último campeonato nacional de tiro con arco en La Paz. Llevé mi libro para equilibrarme y distraerme un poco, y acabé leyendo en voz alta para el lado femenino de la delegación, con los chicos parando las orejas. Y como siempre, Jane Austen agarró una nueva presa y tuvimos a una de las chicas buscando el libro al día siguiente de regresar a Cochabamba, y planeando una gran tarde para reunirnos entre las traumadas a ver la mejor adaptación de la historia: la miniserie de la BBC de 1995.
Y en lo que esperamos las respuestas, y esperábamos el día de la reunión (que fue hoy, por cierto), me puse a dar vueltas por Youtube y me encontré con "El Diario de Lizzie Bennet". Sorpresa! Otra adaptación de la historia en forma de un vlog hecho por una moderna Elizabeth Bennet con la ayuda de su amiga Charlotte Lu. A medida que avanza la historia, algunos personajes más hacen sus propios vlogs, lo que ayuda a ampliar y explicar mejor la trama. En total, son como 160 videos relativamente cortos. Como era de esperarse, acabé enganchada. De hecho, a cierta altura de la historia, ya estaba gritando como adolescente emocionada...y eso que me sé la historia casi de memoria! 
Fue muy divertido ver esta adaptación, reí como descosida, me enojé (otra vez) con Wickham, estuve a punto de llorar por Lydia, y me enamoré (otra vez) del Sr. Darcy.

martes, 2 de mayo de 2017

El mes de la locura

No que abril haya sido un mes malo, aunque sí tuvo sus cosas bien densas. No que haya sido una maravilla, aunque cosas buenas tuvo. Simplemente fue un mes demasiado complicado... complicado, lleno de cosas conflictivas. Si no tuve migraña todo el mes fue de milagro.
De todas formas, ahora que las cosas se van despejando un poco y puedo hacer una valoración más calmada, me sorprende y alegra ver cuántas personas ajenas a mi familia me apoyan y están dispuestas a ponerse de mi lado, incluso cuando ni yo misma quiero hacerlo. Aunque todos los proyectos que llevo haciendo meses, y aunque todos los alborotos del mes pasado resultaran en nada, podría pensar en ese grupo de personas con alegría y contento.