martes, 26 de febrero de 2013

Guerras superheróicas

Llevo un tiempo pensando en escribir esta entrada, pero ya saben como soy, últimamentre hago todo con lentitud. Resulta que mi esposito me pasó una serie de comics de Marvel, que implicaba a casi todos sus héroes famosos y algunas nuevas creaciones. El título de la historia es "Guerra Civil", un nombre muy sugerente y claro, si me preguntan.
Básicamente, la historia comienza con Tony Stark y Peter Parker hablando con el Congreso para tratar de impedir que salga una nueva Ley que obligaría a todos los superhumanos en Estados Unidos a registrar sus identidades verdaderas con el Gobierno, ser entrenados por S.H.I.E.L.D. y pasar a ser parte de las fuerzas del orden. Tony advierte a otros super héroes para presentar un frente unido, pero no logran estar de acuerdo. Tal vez nada hubiera pasado si no fuera por un grupo de super jóvenes que tienen un reality. Buscando más rating,tratan de atrapar a unos supervillanos fugados de la cárcel. Todo hubiera ido bien sino hubiera sido porque uno de esos vfugitivos era Nitro, un loco con la capacidad de detonarse a sí mismo. Nitro estalla en medio del ataque...enfrente de una escuela primaria. En el llamados Incidente de Stamford, mueren todos los villanos, casi todos los jóvenes héroes y 600 personas más, contando con 60 niños de la escuela, que queda hecha un cráter en el suelo.
Después de eso, la nueva Acta de Registro Superhumano se aprueba en menos de una semana, todo aquel superhumano enmascarado que no se registre será arrestado y encarcelado por S.H.I.E.L.D. Sin derecho a juicio ni nada.
Srtark pasa a apoyar el registro, comprendiendo que no hacerlo sería condenar a todos los superhumanos a la extinción, como él lo ve, es el paso lógico de su evolución. El Capitán América, gran amigo de Stark, opina que es una violación a su derecho a la libertad, muchos de los héroes tienen buenas razones para esconder sus identidades, las familias de muchos de ellos fueron asesinados cuando algún enemigo suyo descubrió quienes eran.
Ambos pasan a ser cabezas de ldos bandos completamente opuestos, los amigos se enfrentan a los amigos, muchos mueren, y ambos lados cometen errores garrafales en su empeño de mantener sus ideas.
La serie misma tiene sólo tiene 7 números, pero  se ramifixa a los comics de los personajes individuales, como Iron Man, Capitán América, Spider man, los 4 Fantásticos, etc. Además, aparecen otras líneas paralelas muy interesantes, como la historia del único héroe que sobrevivió al Incidente de Stamford, o la de dos periodistas que tratan de esciribir las historias de los dos bandos, desde sus distintas ópticas y puntos de vistas.
Otra cosa interesante es que , como son varios los dibujantes, hay muchos estilos distintos de dibujo. Muy ilustrativo, literalmente hablando.  Hacienodo una juntada de todos (aunque sospecho que hay algunos más) son 98 números , incluyendo el "Que tal si...", lo que hubiera pasado si se hubiera llevado la guerra de otra manera.
Es super interesante, la verdad. Personalmente, estoy del lado del Capi, aunque a ratos es demasiado ingenuo y se le pierde el rumbo en medio de toda la violencia. Stark es otro cuento, seguramente hace todo con la mejor de las intenciones, pero en un punto se vuelve completamente maquiavélico. Hace por su causa las elecciones difíciles que nadie más se animaría a hacer, pero paga el coste emocional y los obvios remordimientos de conciencia.
Aún tengo algunas dudas sobre varios puntos de la historia, cosas que no tuvieron un cierre, pero eso es solo cuestión de buscar. De todas formas, valió la pena quemarme las pestañas leyendo 98 números a oscuras en la laptop. Como si no estuviera acostumbrada.


jueves, 21 de febrero de 2013

Coches chocados o algo así

¿Todos conocen la metáfora del accidente de coche? Ese que dice, más o menos, que algo es "como un accidente de coche, horrible y aún así no puedes dejar de mirar". Cualquiera que haya estado frente a algo así (un accidente real o algo similar, metafóricamente hablando) sabe de que hablo, y seguramente estarán familiarizados con ese sentimiento morboso.
Más o menos eso sentí cuando vi "Amanecer-Parte 2". La verdad, siendo absolutamente honestas, ese fue el motivo principal por el que compré la película en primer lugar. Puro y simple morbo. Seguramente, todos los que llevan un tiempo leyendo mi blog (digamos, unos años), recordarán que, de hecho, comenté el primer libro, y las dos primeras películas de la saga. Yo también recuerdo eso, no crean, y debo admitir que seguramente estaba profundamente perturbada (un poco más que ahora) en esa época para que haya gustado de la saga más melosa (o al menos, muy cerca) de toda la Historia de la Humanidad (al menos, Romeo y Julieta tuvieron la decencia de morirse).
Admitamos que me gustaba la saga, está bien, pero también reaccioné a tiempo, regresé (parcialmente) a mis cabales y le perdí el gusto. ¿Por qué? Sencillo, queridos saltamontes: es demasiado azúcar y arcoiris incluso para mí. Bella siempre me pareció ridículamente tonta y con una autoestima más baja aún que la mía (al menos, yo sí le descubrí algo de gusto a vestirme bien y admito que tengo algo de gracia). Edward es, seguramente, el tipo "ideal" para muchas, pero supongo que después de tanto "te amo, pero soy un peligro, aléjate" y "te dejo por tu bien", sin olvidar el "eres tan perfecto, guapo" de Bella, una se hartaría y buscaría una reacción no tan perfecta en el muchacho. Vamos, que alguien "perfecto" es cargante. A eso sumémosle los vampiros vegetarianos que son más buenos que el pan y cosas por el estilo, y es como hacer perder la paciencia a cualquiera.
Dejé de ver las películas después de la segunda, y aunque me leí todos los libros, ya me tenían algo más que impaciente en el tercero, y con el cuarto perdí completamente la paciencia. Demasiada incoherencia y detalles completamente bobos juntos. En serio, que un vampiro, ergo Muerto-Viviente-sin-sangre-en-las-venas, embarace a una humana es el colmo de lo ilógico. Con Marce tenemos algunas teorías al respecto, pero que en este momento no vienen al caso.
Pasando a la peli ¿qué puedo decirles que sea más obvio que está nominada a más premios Razzies (lo peor del cine) que nadie este año? Peor película, peor actriz principal, peor guión, y así siguen. Kristen Stewart sigue teniendo el rango de expresiones de una alfombra, tengo algo más de paciencia (y pena) por Robert Pattinson, pero definitivamente el papel de Edward puede ser una de las peores cosas que hará en su vida, en muchos sentidos. Los demás...bueh, sigo diciendo que Jacob se ve bien sin camisa y eso es todo.
La historia es bastante fiel al libro, así que démosle algo de crédito por adaptación decente (que no buena, no se puede mejorar algo que no es bueno de por sí, al menos la mayor parte del tiempo). Los Vulturi dan un poco de miedo, pero no tanto como deberían unos vampiros superpoderosos gobernantes del mundo de la noche y eso. Sádicos sí, aterradores...lo dudo. Aro y su vocecita chillona me pusieron nerviosa del tipo "te golpearía la cara si estuvieras más cerca", el rubio parecía un niño malcriado y el último (supongo que muy fiel a su personaje) tenía cara de "todo me vale un rábano". Dakota Fanning siempre fue una niña talentosa, pero Jane no es su mejor papel y eso.
Y los efectos, por los pantalones de Merlín, ¿en serio creían que un bebé hecho en computadora resultaría realista? Por favor, no creo que conseguir un bebé bonito sea muy complicado en la insdustria del cine, y mucho menos una niña que se parezca a otra más crecida...por no decir un mejor animador. Además, pensé que la niebla esa de Alec era tipo blanca y sutil, no negra y flotando como gusanos.
Al final la batalla fue algo extraña. ¿Aro arrancando la cabeza de Carlisle? Poco probable, es más probable que mande a alguien a hacerlo; ¿Jasper siendo derrotado por unos cuantos Vulturis? Digamos que superado de seis a uno, no tres contra uno; y la mejor parte ¿Bella arrancando la cabeza de Aro? Ajá, en sus mejores sueños, digamos. Por un momento me pregunté si estaban tratando de imitar el baño de sangre de la Batalla de Hogwarts y eso, pero resultó ser todo una visión de Alice o algo así, y al final todo regresó a donde debía, es decir, a "todos somos felices, comemos perdices y vomitamos arcoiris".
Al principio de la peli, sentía el irremediable deseo de huir a donde sea para no ver. Pero, como el accidente de coche, moría de curiosidad a ver qué pavada más hacían Bella y Cía. Eso y que afuera estaba lloviendo a cántaros y tenía frío me mantuvieron quietita en mi camita viendo la pantalla. Esta debe ser la pseudo-crítica más dura que he escrito en todo la historia de este dizque blog, pero ¡hey! creo que la situación ameritaba palabras fuertes.

lunes, 18 de febrero de 2013

Buenas pelis

¿Ya sé,me perdí un montón de tiempo, y considerando que he tenido varios días feriados en las últimas semanas (aunque odie el Carnaval, me encantan los feriados), no debería tener una excusa para no reportarme en este dizwue blog. Aparte de la obvia flojera, que en mi planeta sí cuenta como excusa válida, resulta que con la mudanza cada vez más cerca, y el montón de trabajo en la tienda, pues las fuerzas no me daban para mucho más que para leer un comic (o una serie de ellos) largo como años de tormento pero buenísimo, y...tratar de descansar.
De todas formas, admitamos que estos días he hecho algo más que contemplarme el ombligo: si algo bueno hice fue ver algunas pelis muy buenas. También creo que debo agregar que este post iba a ser escrito después de que viera una película más, y como no tengo ninguna expectativa positiva sobre esa, tendríamos una entrada con un título diferente (algo así como "Pelis y pelis"). Pero después meditando sobre la importancia de no mezclar las cosas buenas con las malas, decidí darles su lugar a estas tres películas buenísimas que ví. Así que...
 
Traducida como "Las ventajas de ser un marginado" o "Lo bueno de ser invisible", esta película fue, sin duda, lo mejor de mi anterior fin de semana. Por una parte, Emma Watson, tan conocida por su papel del cerebro residente en Hogwarts alias Hermiones Granger, se sale completamente de esa imagen, ni siquiera le queda un rastro de su acento británico (lo que, francamente, me parece el distintivo de un buen actor...ser capaz de quitarse los acentos, digo), e interpreta a una adolescente americana algo fuera de lo normal. Charlie, el protagonista, es un muchachito de primer año de secundaria, tímido, muy callado pero muy inteligente, que esconde muchos recuerdos horri
Hasta ahí, no parece que la historia vaya a ir más lejos que los típicos conflictos de adolescentes gringos, secundaria pesadilla incluida: Charlie se enamora de Sam (el personaje de la señorita Watson), se hacen amigos, forman un grupo que incluye al hermano de ella, dos chicas muy extrañas y así. Pero la historia tiene sorpresas mucho más interesantes. Ambientada en los primeros años de los '90, muestra muchas cosas que generalmente no se muestran en otras historias de jóvenes: drogas, homosexualidad, el conflicto de ser aceptado en la secundaria (que es más que ser de los populares o los nerds, al parecer), y los profundos traumas de la infancia.
Es triste, para qué les digo lo contrario, pero toda esa trsiteza viene acompañada por tanta ternura ylgunas risas, que uno simplemente se siente nostálgico, más aún si (como yo todavía) alcanzaron a vivir la época de buscar canciones para grabarlas en un casette.
Pero como no todo en la vida es ternura e inocencia, viene la siguiente película:
 
Veamos, sabiendo que es una película de Quentin tarantino, sabiendo como son la mayoría de sus historias ¿se podría esperar otra cosa que no fuera sangre y muerte de esta película? Lógicamente, tiene una gran historia detrás, a ratos me parecía que no sabía hacia donde iba, excepto por la idea general de Django, el protagonista, tratando de recuperar a su esposa que fue vendida a otra plantación por casarse con él.
Sólo sangre y muerte, bla bla, pero como siempre, los actores que se consigue Tarantino son excelentes. Jamie Foxx (espero que se escriba así) lo hace genial como protagonista, y el cuate que en "Inglorius Basterds" hacía de nazi caza judíos, se vuelva completamente a alemán cazarecompensas sin asco por dispararle a los criminales pero con corazón de pollo por la esclavitud y esas cosas. Leonardo DiCaprio es una historia aparte. Para empezar, no sé de dónde se sacó ese acento sureño, y es muy convincente en su papel de blanco aficionado a las peleas de esclavos, refinado pero muy cruel a su manera, y bastante tonto la verdad. De cualquier forma, resulta increíblemente convincente.
Pero el mejor, según yo, es Samuel Jackson, antes conocido como el Maestro Mace Windu, ahora interpreta al mayordomo de Leonardo DiCaprio, un negro viejo y cruel, mucho más listo que su amo por mucho, aunque a simple vista parezca el patiño que repite todas las últimas frases, es mucho más cruel que él. Y claro, está la muchacha linda que desata todo este lío y venganza por amor. Es genial.
Muchos dicen que Leonardo debería haber sido nominado a mejor actor por su interpretación, y debo admitir que estoy muy de acuerdo con eso.
Y finalmente, mientras se lavan toda la sangre que les salpicó de la pantalla y demás:
 
Esta podría considerarse como una larga diatriba sobre la importancia de los malos para que los buenos puedan lucirse, pero supongamos por un momento que no somos simplistas. La verdad, no esperaba mucho de esta peli, menos después del baño de sangre de Django, pero quedé gratamente sorprendida. Ralph es el personaje "malo" de un videojuego en una tienda de arcades (lo que en mi lado del mundo conocemos como "Tilines"...imagínense por qué), que está algo cansado de su papel, más que nada por las consecuencias: todos en su videojuego lo odian, no es precisamente respetado entre los demás personajes de otros juegos (las niñas corren lejos de él y eso), y encima tiene un grupo de Apoyo a los Villanos (se reunen en la casita de los fantasmas de Pac-man, fíjense). Tratando de conseguir una medalla, se mete a otro juego de incógnito, conoce a la sargento sexy pero amargada por su horrible pasado, y después de eso acaba en el Paraíso terrenal, o sea, una tierra echa de dulces en las qeu se corren carreritas de autos de dulces. 
Ahí se enreda en algun tipo de conflicto con una niña discriminada con una voz muy molesta (como que la dobló la Chilindrina), pero muy dulce en el fondo (bien en el fondo). Y...hasta ahí les cuento. Imagínense lo demás.
Simpática, bonita, nada pretenciosa, y con un final feliz para todos los que no son malos. Buena película para niños y antiguos niños como yo.
Supongo que a estas alturas del baile, muchos ya vieron todas esas pelis (como siempre, llego tarde a las novedades). Si no lo hicieron, háganlo, todas son buenas. Y si lo hicieron...dejen comentarios a ver si mi "crítica" les pareció acertada...o algo.

sábado, 9 de febrero de 2013

Clásicos que no mueren

Hasta hace poco, o al menos, todos los de mi generación y anteriores, conocían al Batman de los años '60. Interpretado por Adam West en sus años mozos, en compañía de Burt Ward como Robin, ese Batman debe ser el completo opuesto del que se ve en las últimas películas. 
La serie no era precisamente dramática (al menos, yo nunca le vi el lado dramático), no era especialmente oscura (Batman no parecía tener muchos traumas emocionales ni nada que se le pareciera), y no era muy seria que digamos. Es más, era hasta para tomárselo a risa.
Consideremos que Batman (según yo) estaba un poco pachoncito, Robin (según yo) tenía una caminada muy rara, los dos llevaban la ropa interior por fuera (clásico algo extraño), los efectos de las peleas consistían en cuadros de colores con escritos como "Pum!", "Kapow!" y "Crash!", y tenían los artefactos de la Baticueva todos con carteles (uno se pregunta si con el uso no aprenderían qué se llama cada cosa), y Robin empezaba la mitad de sus frases con "¡Santas lo que sea, Batman!". Definitivamente, no era como para tomárselo en serio.
De todas formas, la serie tuvo tres temporadas y nos dejó un gran recuerdo a todos los que la vimos. Por ejemplo, yo no puedo acordarme de la serie sin que me den ganas de reír a carcajadas, así que fue una grata sorpresa enterarme de que había una especie de documental titulado "Retorno a la Baticueva".
Este documental va, básicamente, de una rememoración de las épocas de la serie de "Batman" contada por Adam West y Burt Ward, mientras tratan de resolver el misterio del robo del Batimóvil, para devolverlo al museo antes de la visita de los huérfanos. Mientras recuerda, uno se enera de datos interesantes de la serie, y de otras cosas que hubiera preferido no saber (como qué hicieron para disimular lo ajustado de los calzoncillos de Robin). Es bastante divertido, la verdad,  como para recordar con nostalgia los años de la serie (o de sus repeticiones, que es lo que ví).
Si la ven de pasada algún rato, vale la pena verla para recordar los buenos tiempos...y echar unas risas a costillas del Batman más extraño de la historia.

martes, 5 de febrero de 2013

Años de duda

¿Recuerdan el clásico juego de windows, "Buscaminas"? Ese en que tenías un tablerito con diez bombas escondidas y tenías que encontrarlas sin hacerlas volar. Cuando salió el jueguito como agregado del Windows, yo tendría alrededor de 10 años (creo, mi memoria es muy mala), así que me senté a probar todos los jueguitos. El desastre fue que, a pesar de que podía batirme muy bien con el solitario y demás, nunca logré entender la lógica del Buscaminas.
Frustrada, busqué las instrucciones, pero en esa época tampoco me dijeron nada. Un amigo sacerdote, que era un ídolo para el jueguito y porras (al único al que he visto jugar en avanzado y ganar todo el tiempo), trató de explicarme como se jugaba (además de haciendo click en todos los cuadraditos hasta que alguno volara), pero ese día estaba más ocupada jugando a las carreritas en su miniconsola, así que lo único que recuerdo de las instrucciones es que los números tenían algo que ver.
Y así pase años en la ignorancia, y podrían haber sido muchos más si no fuera porque el sábado, día de todos los acontecimientos, sme fijé que alguien había estado jugando al buscaminas en la compu de la tienda. Entré al juego y...perdí al menos 10 partidas, hasta que se me prendió el foquito y entendí de que iban los numeritos.
Al fin, tras años de duda, entendí como se juega el pinche jueguito. Además de desarrollar un vicio y un insano deseo de ganar, me queda una pensamiento dando vueltas por ahí: "Meli, te pasaste de burra".

lunes, 4 de febrero de 2013

Sábados interesantes (escrito en la madrugada del lunes)

Muy a tiempo, eh? Los domingos, a pesar de que me duermo hasta las 11 de la mañana o algo así, me levanto con las baterías en el suelo. Debería darme el día para hacer todas las cosas que no alcanzo a terminar en la semana, como lidiar con la ropa limpia y sucia, limpiar el cuarto, ordenar las cosas, yo que sé, pero las fuerzas no me alcanzan para hacer nada, menos para escribir en el blog.
De todas formas, acá va un resumen de mi sábado. Todo comenzó como cualquier sábado: levantarse temprano, alistarse, ir al trabajo. La diferencia fue que este sábado, mi jefa viajaba a España otra vez, así que me estuve esperando a que viniera a darme las últimas instrucciones para mantener la tienda funcionando y cuidar de su perrito. Después de eso, mi esposito fue a recogerme al trabajo, vinimos a casa y...nos encontramos con el cerro de ollas y platos que, cortésmente, nos dejaron.
Almorcé, lavamos los platos y por primera vez en mucho, mucho tiempo llegué de primera al club. Lo bizarro fue que como no había nadie más que mi hermanita y yo, nos sentamos en una banca, cada una con un libro distinto de Jane Austen, y nos quedamos una buena media hora leyendo. Por cierto, mi hermana no es muy aficionada a leer nada que no sean los subtítulos de la tele (y a veces, ni eso), así que fue por demás extraño verla sufriendo por los personajes de "Persuasión".
De ahí, jugamos un rato a un juego infantil que no recordaba que fuera tan mortal, y tuve que irme al ensayo de coro. Iba yo tranquilamente bajando la calle, cuando veo la librería de la esquina abierta de par en par, algo raro a esa hora en día sabado. Recordando que hace rato que no tengo tinta en mi pluma, me fui a comprar los dichosos cartuchitos. Si hay algo que me gusta en la vida, es entrar a una librería de esas que tienen montonos de cuadernos bonitos, cerros de bolígrafos, plumas, y lápices y cosas así, así que estaba metida en mi elemento cuando recordé que hace mucho que quiero una de esas portaminas de minas gruesas tipo lápiz para dibujar. 
Pedí una de esas y, ¡oh casualidad!, la chica que atendía la tienda muestra una mientras dice: "Sólo nos quedan de éstas, hay ue darle la vuelta a las almohadillas porque son para zurdos...", como si se estuviera disculpando por algo. ¿Saben lo difícil que es encontrar cosas específicamente para zurdos en este rincón del mundo? Estoy muy habituada a batirme con cosas para diestros (en mi vida he usado una tijera de zurdos, y creo que a estas alturas de la vida me parecería hasta raro), pero de todas formas, encontrar algo para zurdos es siempre una tentación. Así que tuve mi portamina-lápiz-versión zurdos-Stabilo-color azul por un precio más que adecuado. En mi planeta, eso es suerte.
Claro, la suerte se me acabó cuando, saliendo de ahí para esperar el micro, unos fetos idiotas pasaron en un auto y me dieron un globazo en la cadera. Más que mojarme (que sí lo hicieron), me hicieron ver estrellas del dolor, sentí un ardor horrible donde me golpeó el globo por mucho rato. No me salió un moretón como pensé, pero el golpe me sigue doliendo hasta ahorita. Ganas de matar a esos imbéciles, caramba.
El ensayo de coro, después de varias semanas de ocio improductivo y arruinador de gargantas, fue divertido, más que nada porque ninguna de las que ahí estábamos tiene una pinche idea de alemán. Recuerdo algunas cosas de cuando cantamos la 9ª Sinfonía, pero no me sentía muy segura como para leer todo un texto en alemán, y menos uno que no conozco ni ide oídas. Resulta que cantaremos al Vals del Emperador de Strauss en un extraño pero hermoso arreglo para coro...con letra en alemán. Nuestro solfeo sonaba bien, nuestro alemán...no tanto. 

El vals es hermoso, uno de los más bellos (más si, como yo, se pasaron parte de una vacación viendo a Romy Scheneider actuando de Sissi y bailando eso con sus hermosos vestidos de gala).
Y finalmente, el cierre de mi sábado: una larga, larga, larga sesión de rol, que terminó con mi personaje muerto por tercera vez, mi esposo muerto y obliterado de la existencia, y un monstruo feo persiguiendo a los dos sobrevivientes. La moraleja: no juegues con cartas mágicas si de verdad no sabes lo que te puede salir (Yu-Gi-Oh puede irse a la mismísima por eso de "confiar en el corazón de las cartas).