miércoles, 30 de octubre de 2013

El viaje agotador

Dejemos de lado los motivos y las razones que provocaron mi loco viaje, pero definitivamente fue demoledor. Digo, salir de noche en flota, hacer un un recorrido de nueve horas, llegar de madrugada, corretear toda la mañana y volver a salir a media tarde en avión para volver, es como para acabar con mi poca resistencia.
Cuando al fin pude detenerme, caí rendida sobre mi camita y dormí como un leño, como hace rato que no dormía. Raro: sigo sintiéndome cansada. A lo mejor necesito unas vacaciones.

domingo, 27 de octubre de 2013

Un año

Hace un año, exactamente a esta hora, iba de camino a mi noche de bodas, después de la mejor fiesta de matrimonio de la historia, lo que significa que era completamente de mi gusto, con gente a la que yo invité, comida que yo escogí y nada de reggaetones estúpidos entre la música para bailar. Todo el mundo me dijo que el primer año de matrimonio es el más difícil, por esa cosa de acostumbrarse a la convivencia cercana con una persona que no es tu familia y que tiene (de seguro) costumbres raras.
No voy a decir que ha sido como una nube de algodón de azúcar, este año ha tenido sus bemoles, pero nada tan terrible como los comentarios podrían hacer creer. Nada de arrancarnos los pelos, ni crisis nerviosas por posibles restos de dentífrico en el espejo o cosas por el estilo. Creo que una de las ventajas de haber tenido un noviazgo es que nos conocíamos lo suficiente como para hacer la transición al matrimonio con relativa tranquilidad.
Habíamos pensado hacer cosas especiales por nuestro aniversario, una de las cuáles era preparar sushi casero y comer hasta morir (no todos los días se cumple un año de casados). Lo cierto es que el día tuvo muchas alegrías (y comida), al final de cuentas, tengo al mejor esposo del mundo, pero no empezó así.
Es cierto que esperaba esa mala noticia en específico, pero aún así deseaba con todo el corazón que no sucediera, que Dios nos enviara un milagro. Obviamente, el milagro no sucedió y la noticia me llegó antes de las 7:00 am (una muy blasfema hora en domingo). Llorar no es la mejor manera de comenzar el día de tu primer aniversario de matrimonio.
Hace un año, era un día soleado y radiante de primavera y yo era una novia radiante en el mejor vestido. Esta mañana, llovía a cántaros en la mañana y yo era una esposa llorando mientras su esposo la consolaba. Un año puede traer muchas cosas y muchos cambios, y aunque no comprenda la razón detrás de muchos de ellos, me siento agradecida porque no estoy sola para enfrentarlos y tengo un hombro para llorar y apoyarme. A pesar de todo, Dios es bueno.

jueves, 24 de octubre de 2013

Auror

Por definición, un Auror es un cazador de magos tenebrosos, algo así como la policía del mundo mágico, ya que todos son entrenados y trabajan para el Ministerio de Magia. Dadas las aclaraciones del caso para los no versados en Harry Potter y mi locura en general, debo hacer un anuncio (ejem, ejem).
Desde que m hijito Rulito partió, estuve pensando en que tal vez sería bueno adoptar otro perrito. No porque quiera reemplazarlo, fue demasiado único para conseguirle un sustituto así no más, y tampoco porque quiera ignorar a mi otro bebé (al que no me dejan traerme acá). Simplemente, me gustan los perros y me hace falta un cachorro para malcriar (no le digan esa parte a mi esposito).
Después de mucho dar la lata por medio de insinuaciones y demás, mi esposito habló con una de sus estudiantes cuyos perritos tuvieron cachorros recientemente, y que los quería dar en adopción. La muchacha le mandó la foto de todos los perritos (juro que parecía sacada de estudio) y uno nos llamó la atención. Es un cachorro de pelaje blanco y dos manchas cafés sobre los ojos, y es el único que no parecía perdido en la imagen: miraba directamente a la cámara con la cabecita inclinada.
Trámites varios y demás, hoy adoptamos al pequeño y nos los trajimos a casa. Es una cosita diminuta, de mes y medio, piernitas cortas y muchas ganas de correr detrás de nosotros. Le compramos una camita, comida balanceada y un ambientador quita olores de pipí y popó para no tener problemas de que el depto acabe apestando, pero al parecer no está interesado en su cama más que como un reto para conseguir la pelotita con la que lo hice jugar. Ahora mismo, prefiere dormir en el suelo pelado, escondido detrás de mis pies. Esperé a que durmiera para moverlo, pero se despertó, se salió y volvió al suelo y se durmió cinco segundos después.
Lo llamamos Auror (yo quería llamarlo Cruel Asesino Llameante, pero al parecer no es un buen nombre para perro).

martes, 22 de octubre de 2013

Ya no existe la primavera

¿En qué baso esa afirmación? En el excesivo y asqueroso calor que ha estado haciendo los últimos días.  En colegio me enseñaron que la primavera era una estación templada y agradable, en que las flores aparecían por todos lados y el amor (cursi) flotaba en el aire, etc, etc. De momento, y ya vamos más de un mes de primavera, lo único que he sentido es calor y más calor.
Admitamos que es todo culpa del sobrecalentamiento global y todo, pero juro que es horrible e inaguantable. Y si a eso le sumamos que el depto es un virtual horno que no se ventila ni aunque abra todas las ventanas, imagínense cómo estoy.
El calor me está friendo las neuronas...

sábado, 19 de octubre de 2013

Cantando, cantando, cantando

Después de mi larga diatriba protestona sobre ese programucho del tres al cuatro (me encanta esa frase), cualquiera diría que estaba del peor humor del mundo. Puede que en parte sea cierto, pero no es que eso me afecte tanto como para ir más allá de protestar en mi blog. De todas formas, nada mejor para mi mal humor que un poco de música.
¿Recuerdan la canción con la que me traumé cuando murió mi bebé? Esa del vaso, por las dudas. Era divertida aunque la letra me pusiera a llorar, y salió de una película sobre (redoble de tambores) canto a capella. Siendo como soy, fanática de The Sing-off, fue una gran alegría que mi amado esposito encontrara la tal película.


La historia tal vez no sea increíblemente original o llena de giros dramáticos, pero es definitivamente entretenida y con muchos diálogos super extraños que matan de risa. Lógicamente, hablan mucho de música, incluida música de películas, y la necesidad de ser original y salir de lo viejo para probar cosas nuevas. Debo admitir que la música moderna, en especial cosas raras como el hip hop y el siempre odiado reggaeton y varias cosas de la industria del pop, no son de mi agrado, me parecen tontas y sin sentido, pero admiro a las personas capaces de hacer arreglos completamente vocales sobre canciones que son hechas para ser interpretadas con un montón de ecualizadores y cosas así.
Creo que está de más decir que disfruté enormemente, y que recomiendo la peli ampliamente. Si les gusta la música, definitivamente les gustará, y si no...bueno, al menos se reirán un buen rato.

jueves, 17 de octubre de 2013

Yo no me llamo (y, por cierto, lo odio)

Hace unos meses, salió al aire en la televisión nacional un programa de, básicamente, concurso de imitadores de cantantes. La idea no es original ni mucho menos, es el formato copiado alrededor del mundo con diferentes nombres, el de aquí creo que compraron el nombre de un programa en Ecuador que se llama exactamente lo mismo: Yo me llamo. 
Debo admitir que, en general, disfruto los programas de talentos, más que nada porque en otros lugares se presentan talentos impresionantes, o si no impresionantes, al menos decentes. Como todos saben, adoro "The Sing-off" y estoy comenzando a disfrutar "The voice", pero esos son distintos.
El caso es que el programa de acá es, francamente, detestable. Lo desprecio con todo el poder de mi hígado. Ojo que no es por los concursantes (al menos, no todos), que como en todo lado hay personas que no lo hacen mal, que tienen buenas voces o que imitan bien a tal o cual artista, como también hay los que una ahorcaría gustosamente porque no le aciertan a una nota y encima tienen el descaro de hacerlo en cadena nacional (y también lleva a interesantes cuestionamientos sobre la sordera colectiva de ciertos grupos).
El motivo de mi odio y desprecio son lo jueces. Lógicamente, siendo el canal lo que es, y siendo e formato lo que es, conformaron un panel de jueces típico, es decir, dos hombres y una mujer. Lo que no alcanzo a entender es en qué se basaron para elegirlos, además de...tener un jurado típico. La chica (googleenla, no me da la gana de escribir nombres) es obvio que está ahí por su cara bonita (que bien bonita es), porque de música no sabe un pimiento. Sus críticas son tan...vacías que realmente no se sabe si dijo algo bueno o algo malo o si su voto debería contar para algo más que para relleno del programa.
Otro de los jueces tiene una pinta única de diva frustrada, se da los grandes aires de "experto en música" pero la mitad de sus críticas no tienen nada que ver con los dones musicales de los participantes o su interpretación y se van a lo meramente físico. El otro juez es un cantante más o menos famosos de un grupo relativamente famoso a nivel nacional, y debo admitir que es el único que parece más o menos ubicado aunque sus críticas tampoco son un dechado de sabiduría. Lo cierto es que ninguno de ellos dice nada que valga la pena tomar en cuenta seriamente.
Al ver el programa y algunas de sus elecciones uno se pregunta si los cuates están sordos o algo, o en base a qué toman sus decisiones porque la mitad de ellas (si no todas) son incomprensibles. No creo que sea pueda culpar realmente a un cantante amateur por hacerles caso o tomárselos en serio porque ninguno de ellos es profesional y sólo cantan de afición y nada más, pero no deja de ser molesto todo esa aura de grandeza y fama que se está creando alrededor de un programa por de más mediocre, incluso en su producción.
No falta talento, lo que en verdad falta es gente que realmente conozca y sepa de música para poder "juzgar" con más autoridad que una cara bonita. 

lunes, 14 de octubre de 2013

Probables futuros

Dado el caos total del anterior mes, no pudimos hacer nuestra casi mensual salida al cine a ver qué novedades nos traía el Sr. Hollywood. Después de parrillada familiar en día lluvioso y de poner unos cactus bonitos en la tumba de mi bebito como había prometido hacer, decidimos que era un buen momento para ir al cine.
En lo que esperamos otras pelis que queremos ver (y que saldrán en bola este mes, al parecer), decidimos ver "Elysium". La historia es sencilla: Los ricos, al final, lograron hacer lo que siempre quisieron y alejarse de la chusma. Se fueron hasta la estratósfera, se construyeron una nueva luna o algo así y viven ahí con todos los lujos y facilidades tecnológicas, incluyendo unas maravillosas cápsulas médicas capaces de curar cualquier enfermedad en segundos y con sólo una escaneada, pero que sólo funcionan para los que tienen una ciudadanía en Elysium, su satélite particular.
Los demás viven en la tierra, superpoblada y contaminada, sin las facilidades de arriba, y eso incluye, lógicamente, las cápsulas médicas. La gente sobrevive como puede y sueñan con comprar un pasaje en los transportes ilegales que tratan de llegar. La mayoría muere en el camino, porque los de Elysium los hacen volar en pedacitos en el espacio, y los que llegan se van directriz a la primera cápsula médica que encuentren y curar sus múltiples males.

Ahí es cuando entra el héroe y la historia se pone algo cursi, pero interesante. El pobre se envenena con radiación en el trabajo, lo despiden, le dan unas pastillas para que siga funcionando y le dicen que se morirá en 5 días. Lógicamente, hace lo que cualquier desesperado trata de hacer: conseguir un pasaje a Elysum aunque se le vaya la vida en ello. 
Con lo que el pobre no contaba es que el costo de su pasaje es un robo a un rico, pero ese rico no es cualquier rico porque se metió en algunas cosas medio densas en la política de Elysium. Una cosa aquí y otra por allá, y se mete en algo más complicado de lo que puede manejar, con un psicópata enfermo siguiéndole los talones, luchando por su vida y todo eso.
La historia es interesante, aunque como dije, es algo cursi y eso. Lo que me parece francamente perturbador es que no creo que ese futuro sea improbable o imposible. Digo, considerando la naturaleza humana, es posibilidad muy fuerte y no podría no creer que tal vez vamos en esa dirección. Triste.

martes, 8 de octubre de 2013

Crímenes vecinales

Tal vez es porque casi toda mi vida he vida en calles relativamente cerradas y calladas. No digo que mis anteriores vecinos no hicieran ruido, pero creo que era más fácil ignorarlos (raro, no estaban más lejos). No me molesta el ruido de noche, si estoy muy cansada puedo dormir a pesar de cualquier ruido o música trucha que suene en los alrededores. En el peor de los casos, trato de leer algo o distraerme de alguna forma hasta que el cansancio llegue a mí y pueda ignorar el alboroto.
Lo que sí me molesta es que el ruido empiece temprano, como a las 3:00 p.m. y sigan y sigan toda la pinche tarde con su música pele, y sus mariachis desafinados. Dice que hace unos años era peor, pero de momento esto me parece excesivamente molesto.
Ahora, la pregunta del mes: ¿Se verá muy mal que mate a los vecinos para conseguir un poco de paz (y espacio sonoro para escuchar mi música)?

lunes, 7 de octubre de 2013

Injusto, injusto, injusto

Asumamos que el paro cívico de mañana no es del todo "correcto", aunque el reclamo sea algo más que lógico (100 mil personas censadas no desaparecen así no más). Asumamos también que no se está haciendo el reclamo más lógico (el del los escaños parlamentarios), y eso le quita algo de su razón de ser al paro.
Pero también asumamos que todos sabemos como funcionan los paros con bloqueos en Bolivia, y que todos sabemos que la gente sólo necesita impunidad y un buen pretexto para hacer tonterías y dejarse llevar por los ánimos exaltados. Asumamos también que ese tipo de situaciones no hacen que la gente quiera salir de su casa sólo por ir de paseo o de compras, por lo que el funcionamiento de ciertos lugares sería completamente improductivo en esas circunstancias.
Eso me lleva a que arriesgar a la gente que trabaja contigo sólo porque no quieres entender todo lo anterior, me parece un comportamiento absolutamente necio, más incluso que el de los que no saben plantear bien el paro cívico. Puede que no suceda nada "grave", pero también puede que suceda. Probablemente, soy la que vive más cerca de la tienda en este momento, y aún así imagino que se me hará difícil llegar, no digamos de las chicas que viven al doble o triple de distancia que yo. ¿Qué se supone que hagan ellas? ¿Caminar? ¿Y en qué se volverán a sus casas cuando sus turnos terminen? ¿Caminando también?
Hablando de decisiones necias. Necesito patear a alguien.

miércoles, 2 de octubre de 2013

Reseteando el universo

Trato de comenzar el mes con buen ánimo, a pesar de que algunas de las cosas extrañas de septiembre se siguen arrastrando hasta aquí. Aún hay muchas cosas difíciles y dolorosas esperando adelante, pero quiero creer que nada será peor que el anterior mes, y definitivamente nada anima un mes como empezar jugando algo de rol.
Llevamos jugando la misma partida por poco más de dos años, y a pesar de nuestras sesiones de pérdida de tiempo olímpica (esas en las que nos íbamos de compras a otros planos o discutíamos una hora sobre qué camino tomar), avanzamos de jóvenes e inexpertos aventureros a héroes épicos amados de los dioses en plan de salvar el mundo. La aventura no fue fácil, complicamos demasiado algunas cosas que podríamos haber resuelto (tal vez) con un poco más de ingenio y menos escándalo (y menos piezas de oro desperdiciadas).
Como héroes, nos propusimos salvar a nuestro plano de la invasión de los diablos que la perra de Glasya, hija de Asmodeo, estaba dirigiendo. Viajamos por todos los medios de transporte posible, hablamos con dioses, logramos forjar alianzas poco probables para combatir al mal, hicimos más de lo que hubiéramos creído posible al principio. Por cierto que perdimos a muchos compañeros (personas y animales) durante el camino, y al final del largo camino sólo quedábamos 3 valientes (y un zorrito con varias colas, no pregunten). Combatimos (para variar) contra una enemiga contra la que, siendo lógicos, no teníamos muchas posibilidades. Como siempre, una jugada de pura suerte nos salvó el pellejo y...caímos redonditos en el plan maestro de Asmodeo.
En nuestro intento por salvar el plano, sólo desatamos el "milagro" que salvaría el mundo, pero no para nosotros. Resultado: Obliteramos a todo el multiverso, los dioses, diosas, los planos y todos los seres que existían y fueron dejaron de ser y todo volvió al inicio del universo, el big bang, damas y caballeros. Sobrevivientes: Asmodeo y...nosotros (zorro incluido).
Nadie más en el nuevo plano que se generó, aparte de Asmodeo, sabe las cosas que pasaron en un plano que nunca existió. Nuestro pasado y nuestras vidas desaparecieron, igual que nuestros compañeros, las alianzas y los peligros. Al parecer, nuestro plano no tenía salvación (demasiado caos a través de los siglos) y lo mejor que pudimos hacer fue eso, resetear todo a cero.
Moraleja: No te metas a jugar con el ser más astuto de todos los planos.
Pronto, el epílogo de nuestras historia. Adiós, Oerth. Hola, Golarion.