domingo, 30 de septiembre de 2012

Empezando la repartija

Entre una cosa y otra, estamos a días de la boda. ¿Nervios? Aún no, muchos. ¿Cansancio? Sí, hasta el infinito. ¿Modo Bridezilla? Cargando.
Recién hoy comenzamos a repartir las invitaciones. Cayeron varios primos y tíos de mi sufrido novio, y me lbré ya de todas las que tenía que mandar a Gringolandia a mis tíos. Así que puedo tachar 6 invitacines de mi lista de entrega, con lo que me quedarían como...unas 50 para entregar. Yupi.

viernes, 28 de septiembre de 2012

Un mes

Me queda exactamente un mes de soltería. Pasando por alto el detalle de que, obviamente, estoy entrando de modo bridezilla por las cosas que faltan hacer, y la presión, y mi amada familia que no entiende que no estoy de humor para comentarios estúpidos (y menos para que después me vengan con huevas del tipo "Tienes pésimo carácter...agradece que somos tolerantes"), etc, etc, creo que la histeria me está alcanzando.
Tal vez es el momento de emborracharme...

lunes, 24 de septiembre de 2012

Y los preparativos siguen

Ahora sí, a un mes y tres días de la boda, puedo admitir que realmente estoy entrando en pánico. Aún son muchas cosas que faltan y ando demasiado cansada/aturdida para tratar de solucionarlas. Definitivamente, es la última boda que preparo en mi vida (espero que mis hijos se preparen su boda solos).
Además del obvio cansancio, está la sensación de que me estoy poniendo pesada, físicamente hablando. No creo haber engordado (mucho) y menos en dos días o algo así, pero siento que el cuerpo me pesa y que si me dan tiempo y una superficie horizontal, no necesariamente cómoda, me podría dormir sin mucho problema (como hoy en la tarde, de hecho). Ayer que hicimos la otra parte de las invitaciones, me caía de cansancio y quería dormirme sobre las cartulinas.
De todas formas, he de admitir que las invitaciones quedaron muy bonitas...aunque aún no se las puedo msotrar, por razones de "seguridad" (léase, a mi sufrido novio le gusta el secretismo y el misterio)...pero como soy una pinche chismosa, les dejo una fotito.

viernes, 21 de septiembre de 2012

En busca de inspiración

Después de la crisis mental del anterior post, debo admitir que he estado buscando algo que me inspire a escribir mejor...o que haga algo más interesante mi vida. Y entre algunas de esas cosas (que, en realidad, no fueron ni muchas), me acordé de cierto Vlog (así con V) que me gusta ver.
HolaSoyGermán es el vlog de un chico chileno que habla de varias cosas, como la infidelidad, la tecnología, el amor, las mujeres, las madres, etc, etc etc. También es el inventor de cosas tan geniales como La Zapatilla Kamikaze, el Fierro golpeador de Parejas Felices, el Manual del Macho que se Respeta y muchas cosas más, todas "útiles" y divertidas. Tal vez lo que dice no es un gran descubrimiento, pero de veras que es divertido.
He estado tratando de ver todos los videos que ha subido (sí, mi mente de veras está desconectada), debo reconocer que al principio era algo plano, no tan histriónico como es ahora, pero aún así era muy divertido. Y la verdad, eso es todo lo que debo decir sobre Germán (ídolo!).

jueves, 20 de septiembre de 2012

Tantas cosas que hacer

Realmente, esto de preparar una boda es más agotador y trabajoso de lo que cualquier podría creer. Corro por aquí y por allá buscando una cosa o la otra, me preocupo por eto o por aquello, y me desespero por todas las cosas que aún faltan hacer.
De todas formas, algunas cosas ya quedaron como la comida, y debo admitir que me sorprendió la de cosas ricas  raras que ofrecían en el salón. 
....
Pausa dramática, y hora de aceptar que se me está secando el cerebro en cuestión de ideas y palabras. Ya no me salen tan fácilmente como antes, cuando empecé este blog. Tal vez es que mi vida está demasiado ajetreada en este momento, tal vez que mi vida es demasiado aburrida y trivial para que merezca ser contada , o incluso leída. Tal vez es que hace mucho calor, o mucho frío, o estoy tan, tan cansada últimamente, que hasta escribir se me hace una carga.
¿Tal vez es el momento de tomarme unas vacaciones del blog? Probablemente, y tal vez debería hacerlo. Dejar de escribir un tiempo puede que sea lo que necesito para refrescar mis ideas...pero todos sabemos que no lo haré, básicamente porque no puedo hacerlo. Sería cerrar mi "vía de escape" de locuras. Y la opción a no escribir locuras, es decirlas en voz alta, y eso suele meterme en problemas. 
Así que...ignoren la sarta de locuras, y espérenme en mi siguiente entrada. Prometo que no será tan trivial (sí, ajá).

domingo, 16 de septiembre de 2012

El Club de Caza y Pesca se encoje

Ayer se nos casó la Jefa de Gryffindor, Sil, con su amado león, Marco. Es la tercera boda del Club y debo admitir que, junto a la mía, era una de las más esperadas. Nos fuimos en tropa, y, como ya se hizo tradición en las bodas del Club, juntamos mesas, reímos a gritos, y nos sacamos una(s) fotos con túnica y varitas.
Aún no puedo subir las fotos porque, ¡hey!, no fue mi boda. De todas formas, fue una noche memorable, en muchos sentidos.Y aprendí algo útil: el nivel de tolerancia al alcohol que tiene el 50% del Club no es muy alto, llegamos muy pronto a la fase de "Yo te quiero".

viernes, 14 de septiembre de 2012

Sustos de medianoche

Hoy es feriado acá en Cochabamba. Nada de trabajo, un merecido día de descanso entre semana. Mi plan desde ayer en la tarde era acostarme algo más temprano de lo acostumbrado, dormir todo lo que pudiera y hacer una parte de las invitaciones para la boda en la mañana. Pero como cada vez que planeo algo, no salió como esperaba.
Para empezar, me convencieron de ir al wally (que al final no jugué porque realmente odio ese estúpido deporte), y de ahí decidieron ir a comer. En vista de que yo también tenía hambre, apoyé la moción, pero no conté con que la mayoría de los boliches de comida rápida ya estaban a medio cerrar, así que tuvimos que peregrinar por todo lado antes de encontrar qué comer (para variar, pollo). Después de eso fui a mi casa, y estaba sentanda viendo tele medio dormida cuando mi mamá se pone mal.
Tuvimos que llevarla de emergencia al hospital. Entramos tipo 00:45 a.m. y cerca de media hora después tuve que regresar a mi casa para encontrarme con que mi sobrino lloraba asustadísimo porque creía que lo habíamos dejado solo. Así que tuve que quedarme a consolarlo y mandar a mi hermana sola de regreso al hospital. En pocas, que dormí mal y poco.
En mi mundo, un susto de esos y a esa hora, tiene por consecuencia lógica que al día siguiente sea incapaz de levantarme temprano, funcione con el 5% de mi nivel de atención, y me sienta muy, muy cansada. 
Qué hermoso feriado...

jueves, 13 de septiembre de 2012

Tradiciones algo bobas

Hace unos cuantos (cientos de años), cuando una mujer se casaba, era tradición (o lo que sea) que la familia de ella le diera una "dote" a su flamante marido. Teóricamente, era una suma de dinero que servía para la manutención de la mujer, era administrada por el marido y, en caso de repudio o separación, era devuelta a la familia (no a la mujer). También estaba el detalle del ajuar de la novia, consistente básicamente en los elementos necesarios para una casa, por ejemplo: vajillas, mantelería, juegos de sábanas, etc... Aunque una parte de ese ajuar también estaba formado por la ropa (de día, de noche, interior) de la novia. ¿Escucharon alguna vez eso de "preparar el ajuar" o "bordar el ajuar"? Pues es porque, por tradición, la novia debía preparar personalmente (de preferencia) parte de ese ajuar, o sea, que tenía que bordar sábanas  manteles y preparar sus ropas y huevas (supongo que la parte de "personalmente" era más que nada para demostrar que no era una "inútil").
Hoy en día, al menos en nuestro amada civilización occidental, eso de la dote y el ajuar ya no se estila. Aunque sospecho que mi mamá no se enteró de la mitad de la noticia, porque hoy insistió en llevarme de compras "para mi ajuar". Juro que no sabía si reír o llorar. Y una buena parte del llanto era motivado por el lógico cansancio de estar 6 horas parada y encima tener que ir a caminar por tiendas.

domingo, 9 de septiembre de 2012

Traumas de la infancia

Estoy segura de que casi todas las personas de mi edad tenemos este trauma en común: La Muerte de Mufasa...Si no lloraron en el cine viendo eso, seguramente lo hicieron en sus casas cuando rentaron el VHS (o se lo compraron). Es casi como una regla de mi generación, nadie estuvo a salvo de quedar marcado de por vida.
Los años pasan, la vida avanza, tu VHS se arruina, o le graban encima, o la cinta queda tan estirada de todas la veces que la viste (encima, éramos medio masoquistas), que dejas de ver las peli y queda como un recuerdo más de tu infancia, uno de esos que puedes tomarte con cierto grado de humor. Hasta que, un nefasto día, viene tu sobrinito con el DVD Edición Especial de "El rey león", y caes en el ingenuo pensamiento de: "oh, eso es de mi remota infancia, y me encantaba".
Te sientas a ver la tal peli, Mufasa muere...y sientes las lagrimitas que te pican en los ojos. Pinche Disney.

p.d. Cuando escribí esto, tenía 4 copas de licor de café adentro. Considerando mi bajísima tolerancia al alcohol, juzguen ustedes mismos.

jueves, 6 de septiembre de 2012

Juegos difíciles de jugar

Terminé la trilogía de los Juegos del Hambre. ¿Qué puedo decirles? Aparte de que estoy traumadísima, debo admitir que es una historia genial. Muy cruel (demasiado), muy impresionante, y que plantea muchas preguntas antiguas sobre la naturaleza humana, sobre esa veta de crueldad y sadismo que el más bueno puede tener guardada.
Katniss me apena, creo que es uno de los pocos personajs literarios al que jamás podría envidiarle nada (ni siquiera al muchacho bueno y noble que se consiguió): Le tocó una vida fea, unos juegos feos, una guerra espantosa y con consecuencias terribles para ella. Debo admitir que el final me resultó un poco frustrante, pero creo que es la única manera en que podía terminar, digo, no había manera en que todo ese lío espantoso terminara en algo completamente hermoso.
Inclusome gustó la fragilidad emocional deKatniss: trata de ser dura, y la mayor parte del tiempo lo es, pero en el fondo es un quequecito, uno que se puede desmigajar si se sabe por donde. Y ahí parecía que todos sabían qué hacer para convertir a la valiente chica en un loca deprimida y con unas pesadillas que matarían de espanto al más cuerdo.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

El fin del vampiro

Fue una batalla horrorosa, como odio a los muertos vivientes que chupan sangre y no paran de regenerarse. Y lo peor de todo, más que la sangre y la regeneración, es que el pinche cobarde huía cada vez. Tuvimos que perseguirlo por medio castillo, mató a dos compañeros (por suerte, después los revivieron), era inmune a todo menos al fuego...y al final la solución era tan simple como perseguirlo hasta que se metiera al pinche ataúd y convertirlo en barbacoa.
Aún nos falta una prueba más para conseguir esa bendita espada, y de ahí, tendremos que salvar el mundo...o al menos intentarlo. Mientras, tengo muy merecido mi descanso.

martes, 4 de septiembre de 2012

Va uno y faltan dos

Como todos saben, soy una apasionada partidaria de que dormir de noche es para los débiles, más que nada porque el silencio de esas horas (gracias, débiles, por dormir) hacen que pueda leer, trabajar y concentrarme mejor en general...a no ser, claro, que yo misma haya sucumbido a la debilidad y me esté cayendo de sueño (algo no tan raro, últimamente). Eso sí, creo ser una trasnochadora razonable, en el sentido de que, por ejemplo, si sé que tengo trabajo al día siguiente, pues trato de dormir más "temprano" de lo que dormiría (o no) si no lo tuviera.
Pero, algunas veces sucede, que por razones ajenas a mi voluntad (que no es la gran cosa, por cierto), resulto que imcumplo mi regla de respetar mi descanso y no pego ojo en toda la noche. Por ejemplo, podría suceder que me tope con un libro super interesante y atrapante. Me pasó con el pirmer libro de Harry Potter, allá cuando tenía 16, me pasó con El Señor de los Anillos casi por la misma época, y me ha pasado con varios libros en mi vida. la última víctima: Los juegos del Hambre. 
Resultó que realmente la película es una adaptación muy fiel de la historia, aunque ciertas cosas que no se entendían en la película (uso de símbolos, por ejemplo) quedan  perfectamente claras en el libro. No esperaba alta literatura, así que el libro me atrapó, disfruté la historia y me quedé sin dormir (todo en uno), aunque debo decir que no fue a propósito. 
Si algo de malo tiene el libro, es que es contado en primera persona, desde lo que Katniss, la protagonista, piensa y ve. Ese estilo me recuerda demasiado a Crepúsculo y a la quejica de Bella Swan (debo decir que le perdí el respeto después del tercer libro), así que aunque Katniss no se queje (mucho), sigue sin ser muy de mi agrado. 
Eso sí, me faltan todavía dos libros para enterar de qué va todo la historia, y si el primero fue un drama, me imagino (espero, de verdad) que los siguientes serán aún más drama (o la idea de una trilogía perdería completamente el sentido. Esperen mi informe detallado para cuando termine la saga...con suerte, hasta el fin de semana.