Estas últimas semanas han sido bastante frustrantes y estresantes. He andado por ahí con los pelos de punta, pasando de una preocupación a otra, de un problema a otro. Eso, definitivamente, no es bueno para mi humor, y menos para la salud física de aquellos que me rodean o se ponen en mi camino por azares del destino.
Seamos honestas: sé que por escrito puedo llegar a parecer una persona bastante impulsiva, incluso algo violenta, pero en la vida real ando tratando de superar eso, la urgencia de saltar a gritarle a cualquier persona a la menor provocación. Si vamos a gritar, que sea al menos con argumentos.
No es fácil, y a veces tengo la ligera sospecha de que la gente disfruta provocarme, a ver cuánto tardo en mandarlos al diablo (o a otra locaciones menos poéticas). Lo malo es que todas esas frustraciones afectan cosas que sí me interesan, como cantar o disparar. Llevo dos semanas o poco más disparando terriblemente mal, y no hablemos de los ensayos del coro.
Siempre he creído que cuando una está así, con ese "todo sale mal", se necesita algo que lo saque de ahí. Mi algo llegó en forma de una moneda de 5 Bs que encontré justo cuando me bajaba del micro rumbo al trabajo. Lógicamente, todo está en mi cabeza, pero las cosas han mejorado un poco desde esa moneda...o eso quiero creer: solucioné un asunto que tenía con el coro, y mi entrenamiento de la tarde fue mejor que los anteriores (tampoco vamos a decir que fue una maravilla, pero es un progreso), incluso conseguí noks para dos de mi flechas.
Definitivamente, no pienso gastar esa moneda en un buen tiempo.