sábado, 30 de abril de 2011

Y se casaron no más

No soy de madrugar, como les dije ayer, pero por ver la boda del amor platónico de toda mi vida, dormir sólo 2 horas valió la pena. Mi humilde (ja!) opinión es que todo respecto a la ceremonia y los novios estuvo hermoso, desde el vestido hasta el sermón del...ni idea el título del cuate que dio el discurso.
Creo que todo el mundo ya comentó la hermosura de la novia, lo gallardo que se veía el novio, como todo salió a perfecto y parecía un cuento de hadas (que esperemos que no salga tan mal como le salió el suyo a Lady Di, pobrecita), así que no me extenderé en eso. También podría comentar que, hasta donde yo lo ví, algunas inglesas, como Victoria Beckham y las Princesas Beatrice y Eugenie , tienen un asco de gusto para los sombreros (si es que a eso se le podía llamar sombrero). Lastimosamente, estar "a la moda" no siempre es lo más acertado.
Podría también hacer un comentario sobre como la Reina se vistió de amarillo canario, y aún así se veía muy bien, o como Camila Parker-Bowles no tiene remedio, o como resulta que la Familia Real se mueve en Minibuses a la Abadía (al menos estilo pueblerino), pero dormir dos horas y armar "El Profeta" y el juego de la semana me tiene agotada y mi cerebro está a punto de desenchufarse. Así que, antes de irme a soñar que la que se casó con el príncipe era yo, les dejo una fotito que me encontré en el Flickr de la Monarquía Británica (se pusieron tecnológicos).

The Mall on the eve of the Royal Wedding
Describe mis sentimientos perfectamente... :P

jueves, 28 de abril de 2011

Estoy desolada


Ya me sentí bastante mal cuando se anunció la boda del amor platónico de toda mi vida con su novia...y mañana ya es la boda!! El príncipe William (mi amor platónico etc.) se casa en unas cuantas horas más (4:00 a.m. acá, al parecer) y yo me siento increíblemente...bueno, triste es la palabra más aproximada.
El hombre ma ha gustado desde que tengo uso de razón, estos último años ha perdido algo de gracia, pero no puedo evitar que me siga gustando. Díganme loca (más) pero por ningún motivo puedo perderme esa boda. No soy de despertar temprano (en ningún día, bajo ninguna circunstancia), pero por el príncipe puedo hacer el sacrificio de quedarme sin dormir (y mi sufrido novio también hará el sacrificio porque es el encargado de despertarme).
Así que, día de dormir temprano para que alcance a criticar a la novia.

miércoles, 27 de abril de 2011

Ya casi terminando

¿Extrañaban las noticias del coro? ¿No? Entonces, lástima por ustedes. Hoy tuvimos un ensayo general más. No sería nada raro si no fuera porque, al fin, terminamos de sacar todas las partes del coro (los solistas que se las arreglen ellos...cuando definan quiénes serán y eso).
Si alguien conoce la obra, pensará que terminamos con la fuga del Agnus Dei, pero ¡Sorpresa! En algún momento nos desordenamos y terminamos con la mini-fuga del Sanctus que, además, se repite al final del Benedictus que, de todas formas, es casi completamente tema de solistas.
Falta solamente definir fechas y demás detalles, que espero no coincidan com otras fechas importantes para mí (como el concierto de Verdi o ¡horror! el estreno de la última película de Harry Potter). ¿No es genial haber triunfado (al menos de momento) sobre Mozart?


lunes, 25 de abril de 2011

On bendita vagancia

Ya con una dosis de chocolate entre pecho y espalda (o más bien, con unas cuantas endorfinas regulando mi mal humor), pude pasar una alegre tarde hacer...nada productivo para variar (¿leer "El castillo viajero" por 4° vez cuenta como productivo). En eso estaba, leyendo y comiendo chocolate para curar las penas, cuando mi hermanita dio un grito desde la compu.
¿Qué tenía la loca? Además de su evidente locura, tenía que, buscando modelos de origami para hacer su trabajo de colegio (hacer 60 figuras de origami, paso por paso y sin que la profesora se digne darles ni un modelo...lo que es la educación moderna, ¿eh?), encontró un modelo de origami de un X-wing (esas navecitas como avión con alas en forma de 'x' de 'Star Wars').
Siendo como soy, viciosa de 'Star Wars', me senté con ella a hacer el tal modelito. Contemplen mi gloriosa obra:
Los perfeccionistas pueden decirme que tiene un montón de fallas, pero ¡hey! es mi avioncito. Por si alguien tiene curiosidad (tiempo, las suficientes ganas de vaguear), las instrucciones están aquí.
Tengo una última duda, antes de cerrar este post. Si por doblar 1000 grullas de papel (ya dejé de contar cuántas hice, sólo sé que son muchas ya) los dioses te dan un deseo, ¿qué te dan por doblar 1000 X-Wing's de papel?

domingo, 24 de abril de 2011

Culpo a las hormonas

Porque así es más fácil hacer que se pase mi último ataque de depresión inexplicable, de esos en que tienes un nudo en la garganta y ningún motivo coherente para llorar. Y si no son las hormonas es que, definitivamente, estoy pasando a ser un cuadro clínico de depresión nerviosa estúpida.
Eso o me volví loca, pero loca de verdad. Y no es bonito volverse loca y darse cuenta de ello.

viernes, 22 de abril de 2011

Cómo sobrevivir a un Jueves Santo con los amigos

Lo primero que debe recordar, querido lector, es que todo depende de con cuántos amigos salga, del grado de tolerancia al azúcar y/o sustancias sospechosas de los mismos, y de los rangos de edad que comprende su grupo de amigos. En mi caso personal, el grupo comprendía 15 personas, a cuál más inquieta y con problemas de adicción al azúcar y cero tolerancia al Agua de la Vida de las hermanas clarisas, y, por si fuera poco, abarcaban desde los 13 a los (sospecho) 30 años de edad.
Tomado en cuenta esos factores, planee su itinerario de recorrido de templos con cuidado, asegúreses de que todos sepan a donde van y, más importante que nada, que todos sepan a qué hora se van a encontrar (tiempo de espera para que todos se reúnan: 1 hora aproximadamente) y/o tengan un celular a mano. Una vez que llegue a las paradas planeadas, debe seguir los siguientes pasos.

1. Asegúrese de que todo el grupo haya llegado a la parada en cuestión.
2. Divida el grupo entre los que entran al templo y los que se quedan afuera a consumir más azúcar.
3. Con los que entran, asegúrese de que todos se sujetan unos a otros (de las manitos, de los hombros, de la ropa) y no se sueltan mientras se enfrentan a la corriente de gente que lucha por entrar al templo.
4. Ya en el templo, no le corresponde vigilar qué hace cada uno de los miembros del grupo. Sólo asegúrese de no perderlos de vista.
5. Para salir del templo, reúna nuevamente al grupo (contarlos no estaría demás) y haga que se sujeten nuevamente unos a otros (ver punto 3). Enfréntese a la masa de gente que empuja por salir.
6. Ya fuera del templo, cuente (otra vez) a su grupo. Busque a los que se quedaron comiendo y espere mientras ellos terminan sus alimentos.
7. Diríjase a la siguiente parada y repita todo desde el principio.

Como ven, es por demás fácil y sencillo.

miércoles, 20 de abril de 2011

Aburrimiento

¿Se han dado cuenta que cada cierto tiempo pongo ese título en mis entradas? Considerando que mi vida es sumamente aburrida, no es de extrañar que lo haga. De todas formas, a veces valoro mi sana de dosis de aburrimiento y rutina, en especial cuando sucede que la vida se me a poner de cabeza.
Ayer tuvimos una noticia de parte de mi hermana, que implica muchas cosas...para mí (o al menos, desde mi manía de dividir las cosas entre "me afectan" y "no me afectan"). Se me hace que esta Semana Santa que ya se viene encima no séra tan bonita y tranquila como me gusta.
Para empezar, estaré a cargo del circo porque mi mamá viajará con mi sobrino...5 días de cocinar para mi ingrata familia que siempre encuentra un motivo de queja para todo. Brincos doy. Trataré de seguir el consejo de mi mamá de desaparecer lo más que pueda...siempre y cuando mi conciencia la permita (a veces me gustaría tanto amordazarla y tirarla del puente).
Mi deseo para los siguiente días (además de ir y atragantarme de cuanto dulce caiga en mi camino el Jueves Santo) es poder aburrirme un poco (pero no de mi familia o de la casa, eso me llevaría a a desesperación, no al aburrimiento).

domingo, 17 de abril de 2011

Responder a un desafío...

Volví, pero para que conste en actas no me la pasé estas horas haciendo la grulla. Bueno, tal vez los primeros 45 minutos desde que publiqué, pero después pasaron muchas cosas (algunas de ellas conocidas como mi sobrino en ataque de pataleta) y tuve que dejar mi mini-grulla a medio plegar (además que el papel tenía que secar un poco...).
Hagámoslo breve, que los ojos me molestan un poco después de pasarme tanto rato bizqueando. Les presento a mi nueva mini-grulla:
Nunca entenderé por qué el Macro de mi cámara no saca las cosas más detalladas...Pero, damas y caballeros, 0,7 cm de grulla para ustedes.

¡¡Es que una no puede perderse dos días!!

Desaparezco dos días dle internet, bueno, uno (el sábado hay demasiada gente en mi casa como para que alcance a conectarme) pero regreso y me encuentro con el post de una amiga. Señora mía, Marce: Lo vuelvo a decir (o a escribir) por tercera vez en este día (en esta tarde, en esta hora): Arrojaste el guante, atente a las consecuencias. He dicho.
Nadie, y repito, nadie, me va a ganar a doblar grullas chiquititas, al menos no dentro del círculo de mis amistades. Mi sufrido novio me envió una foto ayer por la mañana (que les mostraría, pero alguien en mi casa hizo desaparecer el cable USB) con una grulla de 0,8 cm. Lastimosamente, no lo considero un reto por dos motivos esenciales:
1. La competencia es entre Marce y yo.
2. Él es más hábil con las manos que yo (y yo soy la que toca piano y dizque dibuja), así que es muy probable que siga ganando.

Estaba dispuesta a dejar pasar la mini-grulla de mi sufrido novio, pero, Marce, la tuya...!! No lo toleraré! En este momento comienzo a perder mi tiempo...digo! A doblar una nueva mini-grulla que espero me deje en mejor lugar.
Vuelvo en unas horas, cuando termine la grulla (y, por ende, quede ciega) o me dé por vencida.

jueves, 14 de abril de 2011

Ah! Las influencias...

Ayer, en el blog de una amiga (que, por cierto, es privado, así que no esperen el link), vi que se había puesto a hacer grullas de origami (también) y comentaba algo así como "De veras, soy fácilmente influenciable". Creo que es la segunda de mis amigas que está doblando papelitos como histérica para conseguir un deseo (eso sin contar a mi hermana), pero sus grullas tienen algo especial.
En un aparte comentaba que nadie había especificado el tamaño de las grullas, así que ponía de muestra una que había hecho y que cabía cómodamente en una de las teclas de su laptop. No sé de qué tamaño serán las teclas de su compu, aunque imagino que son ligeramente más grandes que las mías, pero de todas formas, ver su mini-grulla plantó una idea en mi cerebro...hablando de influencias.
Así que, dediqué buena parte de mi tarde de hoy (la que no se pasó en ayudar a mi papá a colocar puertas) a buscar algún papel especialmente delgadito y doblar grullitas. Los resultados, damas y caballeros, están a continuación.

¿Vaga yo por hacer una grullita de un 1 cm.? No, para nada.

miércoles, 13 de abril de 2011

Meligami

Se supone que el origami es un arte ancestral y eso, requiere paciencia, precisión, delicadeza y muchas otras habilidades de las que carezco completamente. Pero la idea de una deseo gratis es tentadora.
Sigo sin estar loca, al menos no más de lo usual (que no es poco), pero la Feria Japonesa del sábado tuvo un efecto raro (y espero que mínimamente duradero) en mí. Aprendí a hacer grullas de origami, aunque todas las que hice allá se quedaban para enviar a Japón con buenos deseos. Tendrían que llegar a 3000 en total, y no sé si lo hayan hecho, pero me recordó una leyenda japonesa que dice que si haces 1000 de esas tienes un deseo. Sí, ya sé que puse eso en mi anterior entrada, pero dado que no tengo nada más interesante que hacer con mi vida que dar vueltas, cocinar, cantar, fastidiar, perder la paciencia, leer, escuchar música, alimentar a mis perros, reírme del gato, tocar el piano, pues decidí que no pierdo nada tratando de pedir un deseo.
Así que, queridos vagos que me siguen (sí, ustedes dos), les informo que voy por las (redoble de tambores) 14 grullas y contando. Papel que no sirva que cae en mis manos, acaba metódicamente troceado en cuadrados más grandes o más pequeños y convertido en grullas más o menos deformes (como ya dije, no estoy hecha para sacar pajaritos perfectos).
Siendo así, sólo me faltan 986 grullas más. No es tanto, ¿verdad?

domingo, 10 de abril de 2011

Los Japonésidos

Sé que en su momento no comenté lo que pasó en Japón, lo del terromoto, el tsunami, la central nuclear que siguen sin poder reparar y que por unos días trajo al mundo en un crisis histérica, lo del montón de y desaparecidos...¿por qué? A pesar de que escuché y leí todas la noticias que pude al respecto y que aún me preocupa lo que pueda pasar en Fukushima, creo que soy eminentemente egoísta y mi política es que mi blog es sólo mío. Digo ¿Qué caso tiene repetir lo que todos saben?
Lo que no saben, por ejemplo, es que hoy los residentes japonese, descendiente de japoneses, la Academia Man Césped y el JICA (Cooperación japonesa, si no estoy mal), organizaron una Feria Japonesa acá en Cocha. Fue divertida, con todo, pero debo admitir que me sorprendió que para ser organizada por japoneses, fuera tan caótica.
Empezaba a las 10:00 pero a las 12:00 ya no había nada para comer, y eso súmenle que técnicamente tenías que hacer dos filas para conseguir alguno de los platos. El sol de plomo que caía no ayudaba para nada, estuve casi una hora bajo el sol para conseguir una ficha de sushi, que al final no encontré porque se acabó todo temprano. Un amigo etuvo como 2 horas en una fila que no se movía para conseguir bolitas de pulpo...un caos. Nos hubieramos quedado sin comida si no fuera porque misteriosamente apareció un señor con algunos platos de sushi y todos los hambrientos le caímos encima.
Fue grasioso, porque nos sentamos con los amigos en una gradita en la plazuela a comer sushi con los dedos...rico sushi. Al menos no me quedé con el antojo, peor es nada como dicen en mi colmena. Lo terrible del día fue tener que ir a ensayar después de estar horas parada al sol, esa es otra historia.
Eso sí, hoy aprendí dos valiosas lecciones:
1. Si dicen que algo empieza a las 10:00, hay que ir a esa hora, en especial si involucra comida y cochabambinos.
2. Aprendí a...hacer grullas de origami!
Sé que eso último no cuenta como lección para la vida, pero fue divertido. Además, está el detalle de que dicen que si haces 1000 grullas de papel, los dioses te conceden un deseo...¿ALguien me regala una resma de papel?

viernes, 8 de abril de 2011

Terapeando

Hace unos meses escribía sobre las veces que mis amigas y amigos me pedían consejo sobre sus vidas, o simplemente querían que los escuchara. Lo que no dije es que eso es algo que molesta a mi sufrido novio, no porque le quite tiempo a él o algo parecido, si no porque suelo meterme tanto el problema que vivo preocupada y triste o nerviosa como si fuera mío. A veces, mucha empatía no es buena, al menos para el que carga con las confidencias.
Ya llevaba un tiempo sin jugar a la Dr. Corazón, un papel en el que me veo metida con alarmante frecuencia, pero hoy me llamó una amiga para contarme su drama y...todo volvió a empezar. Lo grave es que esta vez me metí en el lío por los dos lados, porque conocía la "otra versión" de la historia de antes.
Pasa que no sé qué creer, pasa que no puedo confiar más que parcialmente en lo que me dijeron los implicados, pasa que mi consejo para ellos fue el mismo: "Dejen de lastimarse mutuamente y termínenla por lo sano". Lastimosamente, parece que cayó en saco roto, les entra por un oído y les sale por el otro, o peor, ni siquiera les entra, el consejo les da vuelta la cabeza y pasa de largo.
No quiero volver a verme metida en situaciones de "Pero si tú le dijiste, y por qué no me lo dijiste a mi si ya sabías y bla bla". Dado que, al parecer, no puedo ni aprenderé a negarme a escuchar a las personas, voy a establecer una nueva política en mis sesiones de consejos, basada en los siguiente puntos (Estimados pacientes, tomen nota):

1. Si me pides un consejo, no te lo daré. Te diré lo que yo haría si estuviera en tu situación, de acuerdo a mi criterio. Si lo tomas, tú eres absolutamente responsable de lo que ocurra o deje de ocurrir.

2. Cuéntame lo que te pasa, dale. Pero después escucharás, calladito y hasta el final, mi opinión al respecto...que es muy probable que no te guste.

3. Si me vas a contar algo que te pase porque quieres mi ayuda, te escucharé, pero harás el favor de contarme TODA la verdad, sólo la verdad y nada más que la verdad. No te pido TU perspectiva, si no los hechos tal como pasaron, sin excusas.

4. Te diré lo que pienso, pero es sólo para tí. No irás por la vida diciendo "Meli me dijo esto, ¿qué te parece?"*

Lean eso con atención antes de contarme sus problemas y atenganse a las consecuencias. He dicho.

* Principios basados en "Reglas para la vida de mi sufrido novio".

miércoles, 6 de abril de 2011

Justo cuando las cosas parecen ir bien

Iba a comentar sobre mi ensayo de hoy y la inasistencia de muchas contraltos y sopranos que van y arruinan el trabajo de las que practicamos en los ensayos generales, pero hay algo más importante que contar. Hace unos meses, más exactamente, durante la gestión escolar del año pasado, defendí a mi hermana menor porque mis papás armaron un tremendo lío por ver un 45 en la materia de lenguaje en una de sus libretas trimestrales. Desde mi punto de vista (y eso que suelo ser muy quisquillosa con las notas), un 45 sobre 70 no es tan terrible, no digo que sea una buena nota pero no es como para desbautizarse y armar una de Dios nos libre y nos defienda.
Hace un rato, mi papá regresó con la libreta del primer parcial del trimestre (algo así como la calificación de la mitad del trimestre, aunque sólo sobre 60), y mi simpática hermana tiene un 22 en Lenguaje y 33 en Ciencias Naturales. No logro comprender de donde salieron esas notas porque, y no es por defender a mi hermana, no es para nada tonta. Se ha puesto algo vaga, es cierto, pero no como para tener esas notas, en especial si se considera que está muy bien en Matemáticas.
No tengo cara (ni razones) para defenderla en esta ocasión. Estoy segura que se armará una de Dios nos libre y nos defienda, más que nada porque la nota de Lenguaje era predecible: mi hermana no es precisamente reconocida por su gran afición a la lectura, su claridad para expresarse por escrito, ni su pulcra ortografía. También estoy segura de que perderá muchos privilegios como jugar en la computadora, ver televisión, salir con sus amigotas y, lo peor, ir al Club los fines de semana.
Y justamente eso último es lo que más me preocupa por dos razones básicas: Si no va al Club, no podrá tener una entrada gratis para la premier de Julio, por muy vacaciones que sean, no puedo pedir que se salten las reglas por mi hermana. El segundo motivo me atañe más directamente: Dado que soy yo la que la saca al Club, considerado una pérdida de tiempo escandalosa, parte de la culpa va a caer sobre mi cabeza, en especial si se considera que a mi papá le ha dado por culparme de cada cosa que está mal en casa. ¿Cómo diablos se puede intentar salvar a alguien, si se es parte de los condenados?

martes, 5 de abril de 2011

Las chicas al poder

De mucho, realmente mucho, tiempo, hoy fui a unirme otra vez al grupo de viciosos que en su momento ayudé a formar: Los asesinos de Zombies y viciosos del Left4Dead2. Fue una grata sorpresa ver que tantos de los chicos siguen yendo y cómo han progresado desde los inicios en que se chocaban con las paredes porque no podían acertarle a la puerta.
Pero, sin ninguna duda, lo mejor de la tarde, fue cuando me uní a la partida que jugaban cuando yo llegue. Caí en el equipo de los sobrevivientes de entrada que, curiosamente, estaba formado por 4 chicas y un chico (al que queríamos dar un tiro): Clau, Marce, Adri y yo, en el proceso de perseguir al único chico del equipo par evitar que hiciera una burrada, les dimos tal paliza, pero tal paliza a los chicos que era para morirse de risa.
Todo el rato que jugamos en el equipo juntas, pasaba que al menos una llegaba al refugio o al menos muy cerca, pero no dejábamos que los chicos llegaran ni a la mitad que les caíamos con todos los zombies. Las caras de frustración eran épicas mientras Marce, Adri y esta bloggera se la pasaban festejando, gritando, riendo y felicitándonos mutuamente por nuestras increíbles dotes asesinas.
El resultado final fue que les sacábamos el doble y 200 puntos más o algo así, o sea, una barbaridad. Divertidísimo. Chicas queridas: somos las diosas asesinas de zombies y supervivientes.

Aburrida

Superada al adrenalina del ramo (que me duró unas 18 horas), la vida está volviendo a ser muy tediosa. ¿Quieren un prueba? Hoy (lunes) llegó mi sufrido novio con unas encuestas para tabular, por suerte no eran muchas pero me recordó mis años de estudiante y, más específicamente, la vez que ayudé a mi novio con las 300 encuestas de su tesis de maestría (¡Que aún no veo terminada!).
Dudo que haya algo más pesado que tabular encuestas, aunque hay qe admitir que también tienen su lado gracioso. Por ejemplo, estábamos ahí con mi sufrido novio, quejándonos de lo incoherentes que son las personas encuestadas cuando nos encontramos con el siguiente patrón de respuestas:
- ¿Qué es lo que más le gustaría en un radio?
R: Que no hablen los conductores.
- ¿Qué es lo que más le gusta de una radio?
R: Que no hablen los conductores.
- ¿Qué no le gusta de una radio?
R: Que hablen los conductores.

Eso, amigos míos, es claridad de pensamiento a toda prueba...

domingo, 3 de abril de 2011

Ja!!

Ayer fue un día del desastre, realmente. Malo y feo hasta, por lo menos las 3:oo de la tarde, hora en que fueron mi sufrido novio y Marco a recogerme para ir al Club (y mis papás no estaban, así que de todas formas tuve que esperar un buen rato a que volvieran). Estar en el Club siempre es bueno y alegra mi semana, pero no borra los problemas...para ser honestos, nada los borra, pero el escapismo es divertido, verdad?
El caso es que, aparte de unos problemas en casa, estaba de muy muy mal humor por la boda del primo de mi sufrido novio. Parecía que no podía haber elegido un peor día para casarse porque estaba desorganizando toda mia vida. Para empezar, tenía que irme temprano del Club para tener tiempo de arreglarme para la ceremonia, eso en el momento en el que tendría que estar en mi ensayo de coro del Requiem de Mozart que realmente es muy importante para mí y, para rematarla, estaban pasando "Orgullo y Prejuicio" en versión de la miniserie de la BBC en la tele y no podía verla. Mi sábado no podía ir peor.
Después de pasar increíbles carreras para arreglarme (mis hermanas, no yo que no tengo idea de maquillarme más allá de la máscara de pestañas y el delineador) llegó la hora de ir (bastante tarde, por cierto) a la boda. Nos perdimos la ceremonia entre un chiste y otro (y para eso me falto a mi ensayo, ¿eh?) y nos fuimos directo a la fiesta en que quedamos con las dos hermanas y el cuñado de mi sufrido novio en la mesa.
Hasta ahí todo normal, al menos para mí: Baile, charla, risas, el vals y la cena. Hasta que llegó el momento del ramo. Lo tradicional en mi caso es que me niegue a salir a pelearme por ese montón de flores (que no se note que estoy desesperada, porque "el que muestra hambre...no come"), así que, generalmente, tiene que venir alguno de los parientes de mi sufrido novio (que son suyas las últimas bodas a las que fui) para obligarme a salir. Un a vez ahí, lo típico es que ni siquiera haga el intento de levantar los brazos para coger el ramo, ni aunque venga en mi dirección (así perdí el ramo de la boda de mi hermana).
¿Lo raro de anoche? No sólo salí por voluntad propia (casi) y sola (la hermana de mi sufrido novio no quiso acompañarme), si no que me paré justo en el medio de la segunda fila de las chicas desesperadas por el ramo, que es donde cae el ramo generalmente. A eso súmenle que, en diagonal a la masa de chicas del ramo, estaba una mesa ocupada por todos los primos y primas casados de mi sufrido novio, entre los que estaban Annelise y su esposo, Rafo, los que mejor me caen de toda la tropa (porque son los que más conozco), que se pararon y empezaron y gritarme instrucciones del tipo: "Más adelante...no! Más atrás...Ahí!! No te muevas!! Usa los codos!!".
Por si no fuera suficiente locura, y a pesar de toda mi vergüenza (estaba del mismo color que una remolacha), cuando la novia lanzó el ramo (después de intento fallido en que fue a rebotar contra las cortinas que estaban en medio del salón) me lancé a agarrarlo. Y no sólo lo sujeté, si no que otra chica agarró unas cuantas de las flores mientras yo cogía el tallo del bouquet...y se lo jalé! Nadie me quita lo que me gané en justa ley!
Sí, terminé con el ramo en la mano, con toda la mesa de los primos haciendome barra, con la mamá de mi sufrido novio algo "arrebatada" (y conste que cito, eh?) y con mi sufrido novio bajo un nuevo argumento para que lo presionen sus parientes. La changa con la que me peleé por el ramo después sacó el anillo de los chocolates de la torta, así que no hubo lío...o al menos no me remordió la conciencia.
Sólo algo podía haber hecho mejor mi noche: El momento de la liga, vi a mi sufrido novio saltar adelante (y su primo le estaba apuntando a él) y ya pensé que lo había conseguido cuando vi al tipo que estaba a su lado medio empujarlo y poner su mano sobre la suya y...quedarse con la liga. Pinche tarado.
Como dicen en mi colmena, peor es nada y al menos yo hice mi parte. De ahí en adelante la fiesta fue increíblemente divertida, bailando hasta que no podía seguir parada ni un rato más, mientras todos sus primos nos daban vueltas para felicitarnos por el ramo.