domingo, 13 de diciembre de 2015

III Campeonato Nacional de Tiro con Arco

Mi primer propósito para el pasado fin de semana era sobrevivir, todo lo demás vino por añadidura. Y no exagero. 
Fueron tres días, francamente, agotadores. Hasta este momento, me sigo sintiendo cansada. Eso sí, no puedo negar que valió la pena cada segundo pasado, fue toda una experiencia. No puedo decir que conocí mucha gente e hice nuevos amigos, estaba demasiado ocupada tratando de controlar mis nervios para no vomitar en los pies de algún otro arquero en la línea de tiro.
Lastimosamente, me eliminaron (por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa) en Octavos de final. Sé que esto va a sonar sobrador, pero la chica con la que me tocó competir no me ganó por ser buena, si no porque me puse a hiperventilar de histérica. O sea, recordatorio para el siguiente campeonato: no entrar en pánico en eliminatoria.
Incluso con esa humillante eliminación, debo admitir que me fue bastante bien para ser mi primer torneo y no estar tan bien equipada como otros arqueros. Conseguí una medalla de plata en Equipo Femenino Senior (aquí entre nos, aunque no ganamos, mi último disparo fue demasiado bueno), y una medalla de bronce en Equipo Mixto Senior (la parte triste de eso fue que tuvimos que ganar al otro Equipo Senior del club). No me quejo (mucho), aunque definitivamente necesito entrenar más para la siguiente ocasión que se me ocurra competir, y conseguir unas palas de 36 lb. también.

No hay comentarios: