Austen, romance, romance y más romance

Gracias al Youtube (esa cosa es una maravilla y el que lo inventó es uno de los grandes benfactores de la humanidad) mi hermana Tef pudo encontrar una película de la que sólo vio el final y que quería ver el principio, porque lo que vio era ya no de trágico y romántico. Hoy la vimos (la verdad es que teníamos que verla hace varios días, pero siempre pasaba algo y bla bla bla), aunque primero hay que tener la paciencia de un santo para esperar que descarguen todas las partes (o más simple, poner todas a cargar e irse por ahí de paseo).

Pero bueno, "Persuasion" está basada en la novela del mismo título (no como Las Majas de Bergantín...juasjuas) de Jane Austen, el referente obligado de las novelas románticas, de chicas sensatas, buenas y bonitas pero rodeadas de gente que provoca agarrarla a bofetadas. Lastimosamente, a pesar de que a lo largo de las historias esas personas hacen hasta lo imposible para ganarse las cachetadas, la heroína (y el héroe, porque no puede haber una novela romántica sin galán guapo y lleno de todas las perfecciones habidas y por haber) no puede darse el gusto de hacerlo por a) es tan santa y tan buena que en vez de tratar de caerle a golpes a la gente, se preocupa más por ellos o trata de minimizar con su comportamiento las burradas que hacen los demás; o b) la buena educación y la "cortesía" no se lo permiten.

Las novelas de Jane Austen (sólo leí dos, pero me hago una idea) son largas, algo pesadas, muy del estilo "victoriano" (aunque, que yo sepa, Austen es anterior a la Reina Victoria), pero aún así jamás pasan de moda (entre las chicas, claro. No creo que los chicos lean nada de Austen, a nadie le gusta darse por aludido si ve a alguien MUY superior al promedio de chico). ¿El secreto del éxito? Ponga a un tipo que es ya no de guapo y bueno y etc, etc junto a una chica buena y sensata que se merece al galán, en medio de una bola de gente inaguantable que hacen de todo para impedir que estén juntos, mezcle bien y obtendrá una sabrosa historia. De preferencia añada un final feliz antes de hornearla y ¡voilá! Amor verdadero para siempre, o sea, lo que casi todas las chicas desean (otras sólo queremos dinero, jajaja. Ya en serio, si leo y veo historias de Austen...bueno, saquen sus conclusiones).

Claro, además está la parte de la crítica que hacía Austen a la sociedad de su tiempo, el papel de la mujer y todo eso, pero no me considero experta en hacer análisis de las segundas intenciones de los autores (oh, si! al fin algo de humildad). Díganme simplista (atrévanse, a ver) pero yo leo historias románticas por el simple gusto del romance y las historias trágicas (al menos son mejores que las telenovelas mexicanas), y aunque reniegue con la gente estúpida que rellena la historia, no me siento tentada a hacer el análisis sociológico correspondiente.

A lo que me iba, la peli ya me tentó y acabo de descargarme el libro para hacer las comparaciones y enamorarme perdidamente del héroe así como me enamoré de Edward Dashwood, Cnl. Brandon, Mr. Darcy, y como sentí deseos de escaldar en aceite hirviendo al tal Willoughby y Wickham. Eso significa para ustedes, jóvenes saltamontes, que en unos días más o menos (a pesar de que me falta media pieza por terminar de descomponer) tendrán que aguantarse mi profunda y extensa explicación sobre los más oscuros y retorcidos entresijos de la novela. Mientras tanto, les recomiendo vehementemente (oh! que linda palabra) que vean la peli de la BBC, ¡vamos! si van a ver una novela inglesa, al menos que todos hablen con acento británico, verdad?