Esto de la terapia me trae muerta, es el segundo fin de semana que me quedo dos días sin entrar a internet. El anterior culpé a un buen libro, ahora culparé al Mundial, a las amigas que deciden casarse y hacer fiestas a las que no tengo la más mínima gana de ir, a los amigos de la Maestría de mi sufrido novio que nos invitan a almorzar, ver el partido y jugar Wii y, cuando no, a mi querida hermana.
¿Muchas cosas? Y esas son las que logro recordar (espero que sean la mayoría, porque sino significaría que mi memoria está peor de lo que pensaba). A nadie beneficia, ni a mí misma, que no me conecte, con tal que mis horarios de vampiro me dejan trasnochada a mí y a nadie más (creo...).
Per decía: culpo de todo al Mundial porque sus partidos no me dejan tiempo para hacer nada. ¿Que por qué mejor no dejo de verlos? Bueno, es el deber de una buena comunicadora estar informada de todo lo importante que pasa, en especial de fútbol. Y más ahora que perdí una apuesta por estar desinformada, ¿quién me decía a mí que el arquero de Inglaterra tenía manos de mantequilla?
De momento, sólo me he perdido los partidos de temprano en las mañanas. Todos los días juro que voy a pararme mientras mi papá insiste en que el partido está genial, que me levante para ir a verlo, pero, de momento, no lo logro. De todas formas, hay uno que me alegro de no haber visto porque me hubiera deprimido: Corea del Sur le ganó a Grecia en lo que podríamos llamar una Tragedia griega moderna (o eso dijo mi mamá).
Había pensado seriamente comentar como estuvo la boda a la que no tenía ganas de ir, o de como gané para Ravenclaw el segundo lugar en ¿Quién mató a la señora Norris?, o el largo día domingo y de como terminé con un brazo acalambrado trasn un mortal duelo. Lastimosamente (¿para ustedes o para mí?), mi brazo sigue acalambrado y ya no tengo ganas de escribir más...es eso o perderme también el partido de mañana temprano.
¿Muchas cosas? Y esas son las que logro recordar (espero que sean la mayoría, porque sino significaría que mi memoria está peor de lo que pensaba). A nadie beneficia, ni a mí misma, que no me conecte, con tal que mis horarios de vampiro me dejan trasnochada a mí y a nadie más (creo...).
Per decía: culpo de todo al Mundial porque sus partidos no me dejan tiempo para hacer nada. ¿Que por qué mejor no dejo de verlos? Bueno, es el deber de una buena comunicadora estar informada de todo lo importante que pasa, en especial de fútbol. Y más ahora que perdí una apuesta por estar desinformada, ¿quién me decía a mí que el arquero de Inglaterra tenía manos de mantequilla?
De momento, sólo me he perdido los partidos de temprano en las mañanas. Todos los días juro que voy a pararme mientras mi papá insiste en que el partido está genial, que me levante para ir a verlo, pero, de momento, no lo logro. De todas formas, hay uno que me alegro de no haber visto porque me hubiera deprimido: Corea del Sur le ganó a Grecia en lo que podríamos llamar una Tragedia griega moderna (o eso dijo mi mamá).
Había pensado seriamente comentar como estuvo la boda a la que no tenía ganas de ir, o de como gané para Ravenclaw el segundo lugar en ¿Quién mató a la señora Norris?, o el largo día domingo y de como terminé con un brazo acalambrado trasn un mortal duelo. Lastimosamente (¿para ustedes o para mí?), mi brazo sigue acalambrado y ya no tengo ganas de escribir más...es eso o perderme también el partido de mañana temprano.
2 comentarios:
Cuidado con el brazo... luego que vengan unos dementores o algunos mortífagos y cómo sacas la varita.
Ya va mejor, gracias...al menos me sirve de entrenamiento :P
Publicar un comentario