miércoles, 5 de marzo de 2014

Nuevo mes

Lo malo de febrero es que es muy corto, ni siquiera en año bisiesto logra tener un largo decente. Mi mamá me contó una vez que eso se debe a un simpático robo histórico, algo de un emperador romano que quería que su mes fuera más largo y le bajó días a febrero para compensarlo, pero eso es otro cuento. Lo importante es que este febrero no me dio tiempo de nada, y la verdad es que los últimos días no sucedió nada realmente importante, que no fuera mi propia cuenta regresiva para que llegara el feriado de Carnaval. 
No puedo decir que me guste el Carnaval, eso del despelote y la borrachera de tres días (o más) me parece un desperdicio, aunque me encanta el hecho del feriado: fin de semana prolongado y tiempo para relajarse y hacer nada. Una maravilla. Este año, Carnaval caía 3 y 4 de febrero, lunes y martes, contando con el domingo me daban tres días largos y hermosos. Y como qué, fue bastante divertido aunque raro.
Bodas, descubrimientos, premiaciones, salidas al cine, limpiezas generales, partidas de rol (realmente, perdemos mucho el tiempo), de todo hubo. Seguramente debería comentar algo sobre las segundas nupcias, los Oscar que cada año se vuelven más predecibles, y cómo me encanta la película de Lego lo suficiente para verla dos veces en el cine, pero será para otra ocasión. Ahora, ya debería estar durmiendo porque mañana ya no es feriado.

No hay comentarios: