Nunca digas nunca! VAMOS BOLIVIA!

De entrada debo aclarar que el fútbol no es precisamente mi deporte favorito, en gran parte debido a un "terrible trauma" de mi infancia en que cada vez que pasaba las vacaciones con mis primos y ellos querían jugar yo acababa de arquero...no pues, un desastre, imagínense como terminaría un arquero sin coordinación mano-ojo. Hecha esa aclaración, vale la pena también haer notar que yo sólo veo fútbol cuando juega la Selección Boliviana (aunque la mayoría de las veces acabo arrepintiéndome por hacerlo) y que las Ligas alrededor del mundo me valen un cuerno.

Y bueno, ya que estamos a confesarnos, también debería decir que de fútból y sus reglas no se nada más allá de lo básico: hay que meter la pelota en el arco contrario,no no se vale tocar la pelota con la mano, y no se vale patear, empujar, poner zancadilla ni nada por el estilo a los del equipo contrario. Si me preguntan qué re changos es una posición adelantada no me quedará más que declarar mi supina ignorancia en el tema, y eso que me lo han explicado como un millón de veces, pero como no es un dato de vital importancia pues se me olvida.

Pero, yendo al grano, hasta yo con mi escasos conocimientos de fútbol sabía que el partido de la hoy en la tarde entre Argentina y Bolivia en La Paz estaba condenado de entrada. Mientras charlaba con mi sufrido novio, se me ocurrió decirle "imagínate que en una de esas ganamos, los argentinos se mueren...", y la contundente respuesta de mi sufrido novio fue "A ver, hay sueños y hay imposibles. Que ganemos es un imposible, vamos a perder". Tuve que darle la razón porque él (como cualquier hombre que se respete) es el que sabe de fútbol en esta relación y porque viendo los anteriores resultados, no había que ser adivino para predecir el futuro de ese partido. Si hasta dijimos que éramos como los Chudley Cannons del Fútbol! (es decir, un asco asco asco).

De todas formas (como buena masoquista deportiva) me senté a ver el partido con mi hermana Lili, y nos llevamos la sorpresa más grande de nuestras vidas. GANAMOS! AUNQUE NO LO CREAN GANAMOS! 6-1! Cuando vi que Bolivia se iba al ataque de entradita pensé "anda, sí están mentalizados. A ver hasta donde les aguanta", y pareció que se les acababa el lavado cerebral después del empate, pero no! Si limpiamos el suelo de la cancha con la cara de los gauchos!

¿Cuál es la moraleja de esta historia? No confiar en las predicciones de nadie (ni en las de mi sufrido novio. De todas formas la del Ojo Interior acá soy yo), el fútbol se mueve por caminos misteriosos y no siempre por los que uno espera (Eso sonó medio místico, no? juas).