Lógicamente, estos días (vi un incendio el sábado anterior, que siguió al menos por dos días...y ayer empezó otro) el aire está lleno de ceniza, ¡y se nota! El cielo ya no se ve azulito, se ve gris asqueroso en el mejor de los casos...beige en el peor. Asqueroso. Se nota esa capa asquerosa de ceniza hasta de noche (obviamente, las estrellas no se notan).
Insisto, otra vez, en que lo peor que le ha pasado al planeta Tierra es la raza humana. No soy partidaria de los pensamientos genocidas y esas cosas, pero en momentos como este me siento inclinada a apoyar una drástica disminución forzosa de la población...empezando por los que queman el parque y demás lugares verdes.
Insisto, otra vez, en que lo peor que le ha pasado al planeta Tierra es la raza humana. No soy partidaria de los pensamientos genocidas y esas cosas, pero en momentos como este me siento inclinada a apoyar una drástica disminución forzosa de la población...empezando por los que queman el parque y demás lugares verdes.
2 comentarios:
Brillante... aunque no creo que esa la palabra le venga al tema porque realmente casos como este demuestran que los seres humanos podemos llegar a ser verdaderamente estúpidos cuando nos proponemos eso.
La única posible solución que veo es vetar el espacio para el acceso de personas que no sean comunarios de la zona o guarda bosques, sino para siempre al menos por un buen tiempo para que el lugar logre al menos una pequeña recuperación, porque sino esto se repetirá una y otra vez en un círculo sin fin. Sé que puede parecer extremista, pero se llega a un punto que parece la única posibilidad real.
Definitivamente, te apoyo en lo de cerrar el parque. La gente es estúpida y no se merece tenerlo abierto. Si hay que tratarlos como a críos es porque se lo buscan.
Publicar un comentario