lunes, 5 de marzo de 2012

Remedios caseros

Ayer, por algún extraño motivo que escapa a mi comprensión, me desperté con un dolor de espalda de antología. Parecía como si alguien hubiera agarrado una estrella del alba (Traducción: una de esas bolas con púas unidas a un palo con una cadena) y me hubiera golpeado justo en medio de la espalda con eso.

Sumémosle que amaneció lloviendo, y tuve para producir el suficiente humor de perros para toda una mañana. En la tarde, mi mamá trató de hacer la tarde más sencilla para todos y me alcanzó una pomada para dolores musculares y huevas. No me quejo, sirvió...pero hasta por ahí no más. O sea, todavía me dolía, pero no tanto como en la mañana.

Como la gran mayoría de las personas (y no es algo de lo que me enorgullezca la mayoría del tiempo), soy enemiga declarada de ir al médico. Eso sí, mando a todo el mundo a que vaya al más leve síntoma, pero en mi caso hago excepciones porque, gracias a Dios, tengo una salud de toro...dejando de lado mis dolores de anciana, claro. El caso es que, en caso de enfermarme de algo o de que me duela algo, mi solución generalmente implica mate de algo, líquido, descanso, y que nadie me dé la lata, gracias. Curación a la antigua.

Así que, ¿qué hice ayer con mi épico dolor de espalda? Sencillo. A eso de las 6:00 de la tarde, llegó mi sufrido novio con nuestro amigo Gabo1, cargados con el Wii y listos para jugar Just Dance 3. Hace unos meses empezamos con el tal jueguito, y fue una grata sorpresa descubrir que soy prácticamente imbatible.

La única persona que me puede ganar es Gaby 1, y nunca es por mucho. Tengo que estar muy cansada para que alguien más que ella logre sacarme, y si llego a ese punto prefiero retirarme por mi propio pie y volver a después a fregarles más la paciencia a los demás. Mis hermanas son bastante buenas, pero no logran derrotarme...lo que es muy genial.

Volviendo a mi historia inicial. ¿Dolor de espalda? Se fue después de dos canciones. Nada como un poco de terapia personalizada de movimiento para acabar con uno de esos males. En compensación, ahora me duele el brazo.



2 comentarios:

MarceLezcobar dijo...

Esos remedios son los mejores ...

aunque en mi caso ... nada mejor que recostarse en las gradas ... para un dolor de espalda xD

y mi señorita ... me tiene que invitar a una sesion de Wii xD .. haber si le llego a los talones XD

Meli dijo...

Acepto su reto, señora mía!Le avisaré cuando volvamos a juntarnos para hacer "terapia" y "ejercicio" :P