Me atraganto de nachos sabor queso. Digo, es eso o golpear a todos en mi casa, y no tengo ganas de lastimarme las manos, gracias.
Pensé que sería un buen día, es más, todo iba bien hasta eso de las 6:45 en que mi mamá dice que sale a la runión del Colegio de mi hermana porque hay entrega de notas, y mi hermana va con ella, y mi otra hermana la lleva, y mi otra hermana se fue a la fisioterapia y la otra no cuenta porque está de viaje. ¿Quién se queda con la abuela aunque haya dicho antes que tenía ensayo a las 7:30? Su servidora.
El punto es que viene mi amigo el pianista para llevar a Juan al ensayo, y estamos esperando en taxi para irnos, porque confié en que mi cuñado se quedaría aunque sea un ratito, cuando llega mi hermana mayor y me hace tremendo lío porque "podría faltarme al ensayo pero no me da la gana", "ella anda con su hijo de acá para allá", "ella se va a su casa y la desconsiderada soy yo por no quedarme".
En pocas, su lógica es que, básicamente, el trabajo del coro, y los ensayos y que tenga un concierto en dos días vale nada. Gracias por todo tu apoyo, hermana, se me salen las lágrimas de la emoción.
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