Nada, mi perro no aparece. Caminamoscon mi sufrido novio por los alrededores de la casa unas dos horas, volvimos a mi casa caminando por si resultaba que mi bebito se había venido por estos lares. Nada, no hay ni rastro, como si se lo hubiera tragado la tierra.
Sigo preocupada, más si cabe, y a eso súmenle que me estoy comenzando a deprimir. Todos tratan de decirme que va a volver, que va a aparecer, que trate de estar tranquila, pero la sensación de saber que no puedo hacer nada para encontrarlo me está empezando a minar los nervios.
Sigo preocupada, más si cabe, y a eso súmenle que me estoy comenzando a deprimir. Todos tratan de decirme que va a volver, que va a aparecer, que trate de estar tranquila, pero la sensación de saber que no puedo hacer nada para encontrarlo me está empezando a minar los nervios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario