Las tres
Hoy mi buena amiga Nathy se fue a Argentina. Se supone que es sólo una visita a su novio, además de que va a conocer a su familia, claro, pero hay probabilidades de que se quede allá y no vuelva a Cocha (al menos en un buen tiempo).
Ayer salimos a tomarnos un "café" (siempre decimos un café, y siempre acabamos pidiendo cualquier cosa, como jugo de durazno) en nuestro boliche favorito: Buenos Aires, hasta el nombre estaba como a propósito para esa ocasión (si alguna vez vienen por estos lares, les recomiendo ese café, es Bueno, Bonito y relativamente Barato). Hablamos mucho, hablamos de todo como siempre, desde ropa y cocina (por cierto, si lees esto Nath, te debo la receta del Falso Conejo, te la mandaré a tu correo) hasta nuestros miedos y sorpresas por encontrarnos de pronto tan "viejas", y, por supuesto, de nuestros amados novios.
La vida nos ha dado muchas sorpresas desde que nos conocimos. Si mal no recuerdo, al principio no nos tragábamos: yo no era la persona más amable del mundo (sigo sin serlo, pero creo que ya no soy TAN mala onda como antes) y ella no me cayó muy bien que digamos (supongo que era envidia o algo así). Eso fue en el cole, el último año que estuve acá porque para mi promoción rajé de vuelta a Sucre, pero eso es otra historia. La volví a ver en la U, el primer día de clases...y nos ignoramos por muchas semanas.
No sé en qué momento nos volvimos amigas, lo pienso y no hallo el punto en el tiempo en que dejé de verla como una compañera más y pasó a ser una buena amiga. Pensamos muchas cosas juntas, ella, nuestra buena amiga Jahel y yo, hicimos otras tantas, renegamos, reímos, nos preocupamos y respiramos aliviadas muchas veces. Y ahora...Nath se va! Se va y tal vez no regrese! Es la primera de nosotras que se va tan lejos!
Desear que regrese para que sigamos siendo las tres locas de siempre, las que hacen planes juntas y cuando se van de viaje a otra ciudad se van a cenar a un buen boliche y después les da pereza salir a bailar con el resto de la tropa, sería muy egoísta de mi parte. Así que, Nath: que te vaya super bien!
p.d. Sí, estoy sentimental y no me da para sarcasmos.
Ayer salimos a tomarnos un "café" (siempre decimos un café, y siempre acabamos pidiendo cualquier cosa, como jugo de durazno) en nuestro boliche favorito: Buenos Aires, hasta el nombre estaba como a propósito para esa ocasión (si alguna vez vienen por estos lares, les recomiendo ese café, es Bueno, Bonito y relativamente Barato). Hablamos mucho, hablamos de todo como siempre, desde ropa y cocina (por cierto, si lees esto Nath, te debo la receta del Falso Conejo, te la mandaré a tu correo) hasta nuestros miedos y sorpresas por encontrarnos de pronto tan "viejas", y, por supuesto, de nuestros amados novios.
La vida nos ha dado muchas sorpresas desde que nos conocimos. Si mal no recuerdo, al principio no nos tragábamos: yo no era la persona más amable del mundo (sigo sin serlo, pero creo que ya no soy TAN mala onda como antes) y ella no me cayó muy bien que digamos (supongo que era envidia o algo así). Eso fue en el cole, el último año que estuve acá porque para mi promoción rajé de vuelta a Sucre, pero eso es otra historia. La volví a ver en la U, el primer día de clases...y nos ignoramos por muchas semanas.
No sé en qué momento nos volvimos amigas, lo pienso y no hallo el punto en el tiempo en que dejé de verla como una compañera más y pasó a ser una buena amiga. Pensamos muchas cosas juntas, ella, nuestra buena amiga Jahel y yo, hicimos otras tantas, renegamos, reímos, nos preocupamos y respiramos aliviadas muchas veces. Y ahora...Nath se va! Se va y tal vez no regrese! Es la primera de nosotras que se va tan lejos!
Desear que regrese para que sigamos siendo las tres locas de siempre, las que hacen planes juntas y cuando se van de viaje a otra ciudad se van a cenar a un buen boliche y después les da pereza salir a bailar con el resto de la tropa, sería muy egoísta de mi parte. Así que, Nath: que te vaya super bien!
p.d. Sí, estoy sentimental y no me da para sarcasmos.
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